Monterrey, Nuevo León.-
Ocho policías de la corporación Fuerza Civil del estado de Nuevo León fueron arraigados, tras ser acusados de una violación a dos menores hace más de tres semanas.
Fue el 17 de marzo pasado, cuando presuntamente el grupo de elementos policiacos realizaba sus tareas de vigilancia cuando encontraron a dos menores de edad que posteriormente habrían sido llevadas a un lote baldío donde fueron abusadas por tres de los agentes.
La acusación fue interpuesta por una mujer policía que aseguró tener conocimiento del abuso que cometieron sus compañeros. Las víctimas no pusieron denuncia.
Este lunes fueron arraigados los uniformados; dos identificados como Aarón “N” y Salvador “N”, quien junto con un tercero, aún prófugo, son relacionados con el ataque directo a las víctimas. Los cinco restantes habrían sido testigos y partícipes de encubrir a sus compañeros, por lo que también fueron detenidos e investigados.
“Castigo ejemplar”
Tras calificar los hechos como una traición doble para Nuevo León, el gobernador Rodrigo Medina dijo que de comprobarse la responsabilidad de los elementos de Fuerza Civil en la violación de dos menores, se les impondrá un castigo “que sea ejemplar”.
El gobernador dijo que los uniformados recibirán un castigo ejemplar ya que “ha costado mucho” al estado lograr la constitución de una policía acreditable, por lo que se mantiene un seguimiento estricto a dicha corporación.
“Castigo ejemplar, porque queremos que los demás compañeros se den cuenta que si hay un mal comportamiento, incluso la comisión de un delito como pudiera ser en este caso, se va a castigar al máximo, para nosotros es traición doble”.
Aseveró que el estado no permitirá estas situaciones ni retrocederá en su esfuerzo por reclutar más elementos para la primera policía Fuerza Civil.
“Les estamos dando una responsabilidad para que después salgan con este tipo de situaciones”.
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