Villahermosa, Tab.-
La Procuraduría General de la República interrogó por más de 13 horas al ex gobernador de Tabasco Andrés Granier Melo sobre el presunto desvío de recursos públicos, luego de que el ex mandatario acudió de forma voluntaria a comparecer.
Fuentes de la Procuraduría señalaron que acudió en calidad de testigo y que era posible su arraigo.
En una declaración difundida por su defensa, Granier rechazó “de manera categórica” haber cometido algún delito.
“No instigué, ideé, realicé o encubrí acciones u omisiones que causalmente generaran un menoscabo del erario público del estado de Tabasco o un enriquecimiento indebido de mi parte”, aseguró.
Agregó que no armó “tramas financieras o empresariales” para realizar conductas en contra del patrimonio público de Tabasco.
El ex mandatario llegó a las 10:00 horas a las oficinas de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SIEDO) y, cuando habían pasado 12 horas de interrogatorio, la PGR informó que la situación del ex gobernador aún no se había determinado, y el Ministerio Público Federal tomaría la decisión después de concluir la declaración.
Fuentes consultadas en la dependencia indicaron poco antes de la medianoche que Granier tenía el carácter de testigo en la indagatoria, iniciada por los delitos de peculado y lavado de dinero.
La denuncia, explicaron, se interpuso contra quien resulte responsable, y dependerá de las declaraciones y pruebas que ofrezca Granier para que se determine si su situación cambia a indiciado.
En Villahermosa, al ex secretario de Finanzas de Granier, José Manuel Saíz Pineda, se le notificó el auto de formal prisión por la posible comisión de los delitos de peculado y uso de recursos de procedencia ilícita.
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