Con parásitos estomacales,
30 millones de mexicanos: IMSS

México, D.F./Nov. 6
Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informaron que hasta 30 millones de mexicanos son propensos a padecer amibiasis, pues al interior de su intestino se aloja el parásito Entamoeba Histolytica, causante de esa enfermedad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el parásito es responsable de acabar hasta con 100 mil vidas anualmente, sólo después de la malaria en orden de mortalidad por protozoarios en el orbe.
El doctor Jorge Cervantes Juárez, gastroenterólogo endoscopista del Hospital General de Zona (HGZ) No. 2-A Troncoso del IMSS, explicó que a pesar de tener el parásito en México sólo el 15 por ciento, es decir, 4 millones y medio de personas, desarrollan el padecimiento.
Durante 2007, el IMSS otorgó en sus tres niveles de atención 204 mil 630 consultas médicas por esta patología: 174 mil 168 en medicina familiar, 28 mil 834 en urgencias y mil 628 en especialidades.
La amibiasis se caracteriza porque el paciente sufre de un cuadro agudo de diarrea, con moco y sangre, fiebre, dolor e inflamación de estómago y, en ocasiones, estreñimiento o la sensación de querer ir al baño constantemente.
Este parásito se presenta en forma de quiste en el agua y los alimentos contaminados con heces fecales. Entra al organismo vía oral y una vez instalado en el intestino se desintegra, produciendo múltiples ulceraciones y los síntomas antes mencionados.
El especialista destacó que el programa PrevenIMSS otorga a los derechohabientes desparasitantes de una sola dosis, con la finalidad de prevenir la enfermedad; además aconsejó lavar perfectamente los alimentos y hervir el agua.
Por su parte Alejandro García Martínez, médico gastroenterólogo, comentó que en México es muy poco probable que la gente fallezca a causa de amibiasis.
A través de un boletín, el IMSS informó que cuando la afección se complica, el parásito puede viajar a través de los vasos sanguíneos e instalarse en el hígado produciendo abscesos, además de afectar otros órganos como vesícula y pulmones, situación en la que el paciente estaría en riesgo de morir.
García Martínez mencionó que de acuerdo a las circunstancias son necesarios análisis de laboratorio, como el coprocultivo, para conocer más del parásito e indicar el tratamiento correcto, el cual suele ser a base de antibióticos y desparasitantes.
Acotó que la enfermedad es sumamente común en países con malos hábitos higiénicos y dietéticos.
Los expertos recomendaron lavarse las manos antes y después de ir al baño, desinfectar perfectamente bien las frutas y verduras y no consumir alimentos en la vía pública.