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Toluca, EdoMX.-
Cerca de 3 mil armas blancas y cortas decomisadas a presuntos delincuentes permanecen en la 22 Zona Militar, en espera de que autoridades judiciales decreten su decomiso y sean puestas a disposición de Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de las cuales 82 fueron destruidas hoy en la Plaza de Los Mártires de Toluca, en presencia de la gobernadora Delfina Gómez Álvarez y del secretario de Gobierno Horacio Duarte Olivares.
El comandante 22 Zona Militar general de brigada diplomado de Estado Mayor, José Martín Luna de La Luz al ordenar la destrucción de 54 armas cortas y 28 armas largas, informó que aún se encuentran mil 226 armas blancas y 1,639 armas cortas permanecen en los depósitos de materiales de guerra de la 22 Zona Militar en el Estado de México, que están pendientes que las autoridades judiciales decreten su decomiso y sean puestas a disposición de la Sedena,
El general de la 22 Zona Militar convocó a la población en general a que se sume a la donación de armas de fuego que próximamente se va a llevar a cabo en municipios del Estado de México, dentro del marco de las Ferias de la Paz.
Destrucción con sierras eléctricas
En esta destrucción realizada con sierras eléctricas se busca destruir todas las partes que son esenciales para su funcionamiento y evitar que se puedan usar para “canibalizar” es decir crear otras armas o reforzar existentes, señaló el comandante de la 22 Zona Militar.
Las 82 armas largas y cortas destruidas hoy fueron aseguradas por elementos del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y autoridades policiacas del Estado de México.
“La destrucción se realizó conforme a lo establecido en el Procedimiento Sistemático de Operar para el Control, Destrucción y Aprovechamiento Lícito de las Armas de Fuego Decomisadas, las cuales fueron inspeccionadas, desorganizadas y seccionadas, dando certeza y confianza a la sociedad de que el armamento que hoy fue destruido perdió plenamente las características y particularidades para las que fueron creadas”, puntualizaron autoridades castrenses.
Con esta destrucción de armamento “se busca reducir la violencia y evitar que las armas lleguen a manos de la delincuencia, el uso ilegítimo es una afrenta a la concordia”, al mismo tiempo señalaron fuentes de la Sedena, “que las armas deben ser portadas por quienes tienen la encomienda de proporcionar la seguridad ciudadana y no por quienes dañan a la sociedad”.