Cd. de México.-
Con sus señalamientos contra la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el presidente Andrés Manuel López Obrador sólo evidencia su gran resentimiento contra esta institución, asegura el expresidente de la Comisión de Derechos Humanos del extinto Distrito Federal y académico de la máxima casa de estudios, Luis de la Barreda Solórzano, luego de las acusaciones del presidente en torno a que esa institución “se hundió en el derechismo”.
“Extrañan sus acusaciones contra la Universidad porque es su alma máter, fue la que le dio un título profesional. Muchas veces, esas posturas tienen una explicación psicológica. No sé si ese resentimiento tenga que ver con que él tardó 14 años en obtener un título que normalmente se obtiene en cuatro o cinco años”, señala.
De la Barreda Solórzano refiere a EL UNIVERSAL, que por sus actividades el Ejecutivo federal “ha tenido poco tiempo para leer, lo que se nota cuando uno lo escucha. Basta oírlo unos minutos para entender que tiene poco tiempo para leer. Si él hubiera leído los artículos, los ensayos, los libros de los profesores de la UNAM no hubiera hecho un señalamiento como el de esta mañana.
“Se ha comprobado que las conferencias mañaneras abundan en mentiras muy claras. En la UNAM hay una completa libertad de cátedra, una completa libertad de investigación, así como una plena libertad de expresión. Los profesores, los investigadores y los estudiantes de la UNAM, tenemos la más amplia libertad para expresar nuestras opiniones e ideas”, señala.
¿Qué es lo que persigue el Ejecutivo federal con sus críticas contra la UNAM?
Lo que al parecer busca López Obrador es una universidad partidaria, una universidad aplaudidora de su ideología, de sus dogmas, de su fe. Una universidad que le rinda pleitesía como se la rinden los legisladores de Morena y muchos de sus adeptos.
Señala que la UNAM ha defendido siempre su autonomía, el pluralismo de su comunidad académica y estudiantil.
“Y así seguirá. Nunca encontrará el presidente una universidad que unánimemente aplauda sus ocurrencias. Siempre encontrará académicos y estudiantes que analicen las políticas públicas de su gobierno con un sentido crítico”, comenta.