Cd. de México.-
Este martes 20 de febrero, el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya Austin, abandonaría el Reclusorio Norte, dónde estuvo preso más de dos años, luego de que un juez de amparo le concediera llevar su proceso por el caso Agronitrogenados en libertad condicional.
Tras esto, Juan Pedro Contreras Navarro, juez de amparo de la Ciudad de México, impuso a Lozoya Austin diversas medidas cautelares como la colocación de un brazalete electrónico, retiro de pasaporte, la prohibición de salir del país y la firma del libro de procesados cada 15 días.
Por su parte, la Fiscalía General de la República (FGR) acusó a jueces y magistrados federales de otorgar a Lozoya Austin privilegios procesales totalmente injustos y desproporcionados.
Al darse a conocer esta noticia, en distintas plataformas, varios cibernautas han revivido la vez que la periodista Lourdes Mendoza reveló en redes sociales algunas fotografías de Emilio Lozoya cenando en un restaurante de lujo de la CDMX.
En octubre de 2021, la comunicadora asistió al restaurante chino Hunan, ubicado sobre Paseo de la Reforma, luego de haber recibido una fotografía por parte de Javier Lozano, exsecretario del Trabajo en el sexenio de Felipe Calderón, donde se apreciaba a Lozoya cenando con un grupo de personas pato pekinés.
“Javier Lozano justamente es la persona que me avisa, que me manda justamente esa primera fotografía que sale y me dice: esto está ocurriendo en tiempo real, ahorita está Lozoya en el Hunan”, relató en aquella ocasión Lourdes Mendoza en una entrevista con el periodista Ciro Gómez Leyva.
También señaló que la foto en el restaurante fue factor para que Lozoya Austin fuera llevado a la cárcel.
“Si Lozoya está en la cárcel es porque esa foto lo que hizo fue evidenciar el pacto que había entre una persona, el ícono de la corrupción del gobierno de Enrique Peña Nieto, y la Fiscalía General de la República”, manifestó.
Estas imágenes causaron el enojo de varias personas entre ellos el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien dijo que dicha escena no era ilegal, pero sí inmoral, por lo que en ese entonces pidió a la Fiscalía General de la República ( FGR ) informar sobre el caso. Asimismo, hubo quienes mencionaron que “cómo era posible que Lozoya pudiera darse el lujo de comer en un lugar carísimo´´, tras haber sido acusado de recibir sobornos millonarios de la constructora brasileña Odebrecht”.