Cananea, Sonora / Abril 19.-
Al atardecer, los mineros se sentaron a comer. A las puertas de Grupo México plantaron un grupo musical y al ritmo de corridos del norte, bailaron… A tres kilómetros, los mil agentes de la Policía Federal recibieron órdenes: “En las próximas horas se retomará Cananea”.
Mientras, la dirigencia del sindicato minero pidió la intervención del gobernador Eduardo Bours. El delegado de la cúpula minera nacional en Sonora, José Juan Gutiérrez Ballesteros, advirtió que si bien se trata de un conflicto federal, el mandatario debe proteger a los cananeos.
Así pues, cada día que pasa del mes 21 de la huelga que sostiene la sección 65 del sindicato minero relaja a los obreros… al tiempo de que los oficiales federales fueron concentrados en los cuatro hoteles donde se hospedan.
Ahí, confirmó el mando a EL UNIVERSAL, reciben capacitación sobre el material que pudieran utilizar los mineros para repeler a los policía: balines de acero con un peso de 500 gramos, bombas molotov, piedras y petardos.
Los gendarmes practican con el equipo antimotín colocado, la forma en que utilizarán los escudos para evitar que los objetos que les arrojen no les hagan daño. “Se formarán tres líneas, todos pegados, con el bastón pequeño sujetan los escudos y con el grande responden las agresiones”, se escucha la instrucción.
Las labores de inteligencia continúan con el reconocimiento de la zona por dónde llegarán a las puertas donde se tienen instaladas guardias permanentes que cambian cada 8 horas, pero que los mineros analizan con hacerlas por 12 horas.
“Es inminente que el personal actúe para retomar el control de la planta. Sólo esperamos que se confirme que la suspensión provisional que se concedió al dirigente de la sección 65 no alcanza para amparar a todos los integrantes del sindicato… será al amanecer”, advierte el mando a cargo de los mil jenízaros.
Este sábado los mineros y sus familias se sentaron a la entrada de la mina de tajo de donde se extraen más de mil toneladas diarias de cobre… comieron barbacoa, frijoles y salsa, se bebieron cartones de cervezas y cientos de refrescos mientras sonaba el grupo Guardianes del Cobre.
Apúntele —ordena una mujer al reportero—- que aquí las mujeres de los mineros no los vamos a dejar solos, que estamos las familias unidas… que aunque venga la policía no nos van a matar niños, vamos a morir de hambre.
Otra secunda: “Vamos a defender nuestro pedazo de tierra. Larrea (cabeza de Grupo México) ni es de aquí… sólo que se recuerde donde comenzó la Revolución… vendremos con nuestros hijos a defender a nuestros hombres”…
Las mujeres comen en la caja de una camioneta de lujo… llegan otros mineros con sus familias… los cinco músicos del grupo, todos mineros, se hacen bolas mientras conectan y desconectan sus instrumentos.
Así, pasan las horas… y dicen : “Estamos listos para enfrentar a los federales cuando lleguen”
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