Ciudad de México.-
El bloqueo que realizó Estados Unidos a las importaciones de jitomate contra unas empresas solo fue para unos embarques, pero ya se quitó la prohibición y sigue el proceso de investigación, dijo el vicepresidente nacional del Sistema Producto Tomate, Manuel Cázares.
A pesar de ello les preocupa que vayan a iniciar casos contra productos en donde los estadounidenses sienten una fuerte competencia de México como es el caso de los chiles, pimiento rojo, berries y aguacate.
Incluso “hemos recibido comunicados de que la FDA (Food and Drug Administration), y CBP (Customs and Border Protection) va a intensificar las revisiones o inspecciones para evaluar el bienestar de los jornaleros, van a visitar las agrícolas, los campos y tenemos que revisar documentación, que la gente tenga prestaciones y que no haya niños trabajando” y eso todas las empresas mexicanas agrícolas lo saben y trabajan en ello.
Recordó que hace un mes se detuvieron embarques de jitomate de Agropecuarios Tom y Hortícola Tom porque supuestamente esas empresas violan la ley al permitir el trabajo infantil, sin embargo, hubo irregularidades en el proceso de investigación, explicó Cázares.
De acuerdo con la legislación aplicable la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) no debió frenar la importación de jitomate de las empresas sin antes realizar una investigación.
“Actuaron improvisadamente y no investigaron primero, que fue lo que se les dijo y tenían que dar oportunidad al productor de presentar sus argumentos”, pero no se siguió el proceso”, expuso.
Por eso CBP tuvo que permitir nuevamente la importación de jitomate de Agropecuarios Tom y Hortícola Tom porque no hicieron los procedimientos necesarios antes de impedir las importaciones.
Actualmente “no hay bloqueo, porque de acuerdo a la ley y al T-MEC no pueden actuar de esa manera, primero tienen que enterar al productor, hacer investigación y luego actuar, aquí fue una situación que todavía se está investigando, que temíamos que se fuera a llevar a otras (empresas) agrícolas, pero no ha habido ningún bloqueo para nadie”, añadió.
Dijo que si bien se frenó el caso contra las dos exportadoras de jitomate, los estadounidenses “siempre hacen ese tipo de ruido para vender el producto” ante la fuerte competencia de México, pero tratan de inventar que hay competencia desleal cuando no existe eso.
En otras palabras, añadió que los estadounidenses “siempre van a estar presionando a ver a quién le encuentran y le van a cerrar”.
Sobre el monto de las exportaciones de jitomate mexicano dijo que en 2019 la cifra alcanzó el 1.9 millones de toneladas en 2020, por la pandemia se redujo a 1.6 millones de toneladas y en 2021 con la reactivación de escuelas, restaurantes y cruceros se puede llegar a 1.8 millones de toneladas, comentó.
Entre México y Estados Unidos hay un acuerdo de suspensión del tomate, por el cual los jitomates mexicanos se tienen que vender en un precio mínimo de 8.35 dólares la caja de 25 libros de jitomate saladet, a cambio de no pagar la cuota arancelaria de 17.56%, por un supuesto dumping, es decir, venta del producto por debajo del precio real.