El presidente Felipe Calderón le hizo una exigencia directa al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, para trabajar en coordinación en materia de seguridad y dejar de lado las diferencias partidistas, sin claudicar en los principios ideológicos.
El titular del Ejecutivo lanzó esta convocatoria en un tono de molestia a Ebrard, a quien no citó en ningún momento por su nombre.
Incluso, dijo que de haberse puesto de acuerdo con anterioridad con las autoridades capitalinas ya se hubiera avanzado más en esta materia.
La exigencia surgió a raíz del asesinato de Fernando Martí, hijo del empresario de artículos deportivos de la marca Martí, quien después de dos meses de haber sido secuestrado fue encontrado sin vida el viernes pasado.
“Hago un llamado enérgico también para que nos pongamos de acuerdo y que dediquemos nuestra actividad pública y los recursos de la gente no para actividades políticas que dividen a los ciudadanos, sino los problemas que verdaderamente afectan a la gente, como es el caso de seguridad pública.
“Si estuviéramos más unidos, el gobierno federal y los gobiernos estatales, y en este caso el Gobierno del DF, seguramente ya hubiéramos avanzado mucho más en el camino para mejorar la calidad de la Policía, particularmente la de aquélla entidad”, puntualizó.
En un tono que denotó incluso enojo por parte de Calderón, calificó como cobarde el asesinato de Fernando Martí, peor aún porque quien formaba parte del núcleo de la banda era un policía del Distrito Federal.
Estos hechos, señaló el mandatario, tienen que movilizar a la sociedad, y por ello sostuvo que más allá de las banderas políticas se tiene que trabajar en coordinación para atacar a la delincuencia organizada.
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