México, D.F. / Noviembre 18.-
El presidente Felipe Calderón Hinojosa afirmó que es crucial apoyar la iniciativa de reforma constitucional para crear el mando único policial.
Ante gobernadores, excepto Marcelo Ebrard, jefe de gobierno del DF, Calderón insistió en que cada orden de gobierno debe hacer cumplir la ley y advirtió que la democracia no puede consolidarse sin estado de derecho.
Al inaugurar la XXIX del Consejo Nacional de Seguridad Pública (CNSP) en Palacio Nacional, previo desayuno, afirmó que el mando único policial fortalece las atribuciones de las policías estatales en la lucha por la seguridad y mandata estándares policiales.
Insistió en la necesidad de este mando: “ahora es crucial que todos apoyemos esta iniciativa que aún se encuentra en deliberación en el Congreso, que recoge una demanda ciudadana y deriva de un acuerdo del CNSP y que aumentará eficacia de todos los gobiernos para combatir a la criminalidad”.
Recordó que para la implementación del mando único estatal de policía el Congreso ya destinó 2 mil 400 millones para el 2011.
Recordó que envió ya la reforma en materia de lavado de dinero para pegar a los delincuentes en sus finanzas y junto con la propuesta de mando único policial “son claves en la lucha por la seguridad”.
Solicitó que “todos los integrantes del Consejo podamos impulsar con capacidad y liderazgo político la reforma ante los representantes del Congreso de la Unión”.
Ayer, el presidente del Senado, Manlio Fabio Beltrones, anunció revisiones a fondo a las iniciativas contra lavado de dinero, el mando único y fuero militar.
El secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, dijo que se trabaja con legisladores.
Calderón admitió que la sociedad no quiere excusas sino respuestas y resultados en el combate a la criminalidad.
“La opción ética, y moralmente viable para el Estado es la enfrentar el problema de la criminalidad, y hacerlo de manera integral”, urgió.
Sostuvo que se han decomisado 90 mil armas a los delincuentes, que serían suficientes para armar a cualquier Ejército de América Latina o África.
Dijo que los recursos para seguridad y para las entidades en este rubro -13 mil 800 millones- para estados
son los más altos de la historia, pero ahora les toca a los estados ejercerlos con oportunidad y transparencia.
El gobierno federal ha documentado subejercicios en los estados en el gasto de seguridad.
“El Fondo de Aportaciones a la Seguridad Pública se incrementó, para llegar a siete mil 100 millones. El Subsidio para la Seguridad Municipal se situó en cuatro mil 300 millones, además de otros fondos específicos para la eventual aprobación, si así lo considera el Congreso, de una reforma en materia de Mando Único”, precisó.
Reiteró su disposición a adaptar lo necesario de la estrategia contra el crimen para abatir a la delincuencia.
Al inaugurar la XXIX del Consejo Nacional de Seguridad Pública dijo que la violencia del crimen entre grupos y contra ciudadanos y autoridades “desalienta y preocupa” a la sociedad.
“Ellos (los criminales) son los enemigos de la sociedad, así debemos entenderlo y asumirlo”, demandó.
Afirmó que su administración ha golpeado las estructuras financieras y operativas de los cárteles de la droga y citó los casos de Ezequiel Cárdenas y Edgar Valdés, entre otros.
“Se ha golpeado, como nunca antes, las estructuras operativas y financieras del crimen; se ha asegurado droga con un valor superior a los 10 mil millones de dólares”, informó.
En drogas se ha decomisado lo que evitó que 50 mil millones de dosis llegaran a jóvenes.
Además, han detenido a 3 mil 300 secuestradores, desmembrado 600 bandas y liberado a 4 mil 100 víctimas.
Comentó que 25 entidades ya crearon sus unidades especiales antisecuestro y urgió a los que faltan a alinearse en esta ruta.
“De manera integral, se golpea y debilita al crimen. Y ese es el único camino viable y definitivo para acabar con la violencia y su amenaza”, explicó Calderón.
“Hoy la criminalidad pretende que vivamos con miedo, bajo la amenaza constante de su acción a través del asalto, la extorsión, el secuestro y, por supuesto, la violencia”, expuso el presidente.
Los delincuentes “en esa lucha comenzaron a someter por una vía u otra a las autoridades y ciudadanos, con objeto de neutralizarles o sumarles a su bando, en contra de sus enemigos”.
“violencia y la barbarie practicada por los criminales en contra de sus enemigos y en contra de la sociedad han llegado a niveles intolerables e inadmisibles”, añadió.
“A todos los gobiernos, sea el Federal, el estatal o el municipal, nos preocupa la delincuencia y la violencia irracional que utiliza, pero suponer que esa violencia se termine o se reduzca a partir del mero retraimiento de la acción del Estado o de poner en práctica una política de no hacer, de dejar hacer, de dejar pasar, es simplemente iluso, insistió.
No actuar no sólo incrementaría el drama familiar de los secuestros y la drogadicción.
“La inacción, no sólo conduciría a un desbordamiento de la violencia, sino que representaría un nuevo agravio a las víctimas del crimen. De no actuar, qué cuentas rendiríamos a las familias que han perdido, o pierden, a sus hijos en manos de los criminales, a quienes viven, ahora mismo, constantemente amenazadas y sometidas al yugo de la cuota, o de la extorsión, que permanentemente perpetran los delincuentes en diversas zonas del país”, expuso.
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