Morelia, Mich.-
La Tercera Sala Penal del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, dio a conocer que el ex encargado del orden de la Nueva Jerusalén del municipio de Turicato Michoacán, Cruz Cárdenas Salgado, presentó el pasado lunes una apelación a su juicio en el que se le acusa de ser el autor intelectual de la destrucción e incendio intencionado de una escuela primaria de la localidad.
Armando Pérez Gálvez, juez de la Tercera Sala Penal, señaló a través de un comunicado que el proceso de apelación tendrá una duración de entre 40 y 70 días hábiles, dependiendo si la defensa desahoga o no pruebas.
Cruz Salgado fue aprehendido cuando se presentó el pasado 18 de octubre en las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE) para solicitar una carta de no antecedentes penales.
Fue acusado entonces de autoría intelectual de los mencionados hechos mencionados por lo que le fue impuesta una multa de 2 millones 774 mil pesos, para resarcir el daño ocasionado en bienes del estado.
Sin embargo Cárdenas Salgado no pudo pagar el monto exigido por la ley por lo que aún permanece preso en un penal de Morelia.
El inculpado y su defensa legal, apelan en este momento la resolución de la jueza Emir Elvira Rodríguez Izquierdo, titular del Juzgado Séptimo Penal de Morelia, quien dictó el auto de formal prisión.
Una vez que el magistrado resuelva el caso, esté retorna por ley al Juzgado donde se lleva a cabo el juicio correspondiente, quien a su vez dictará un nuevo juicio.
En tanto, en la Nueva Jerusalén los habitantes de uno y otro grupo se mantienen a la expectativa tras la alerta surgida por un volante, presuntamente hecho por el grupo seguidor del obispo Martín de Tours, que amenaza a los disidentes de expulsarlos por la fuerza.
Este martes, trascendió, se reunieron en privado una comitiva de religiosos de la parte de Martín de Tours, con personal de la Secretaría de Gobierno.
Desde hace una semana y luego de la detención de ex encargado del orden de la Nueva Jerusalén, Cruz Cárdenas Salgado un grupo de mujeres expulsó de la comunidad a una docena de policías estatales que resguardaban la oficina de la Encargatura del Orden.
A partir de esto se integro un grupo de mujeres que a la fecha han tomado el control de la localidad y dicen estar a cargo de la seguridad del pueblo
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