Juchitán, Oax.-
Las lluvias de la depresión tropical Once-E, provocaron inundaciones de viviendas, desbordamientos de ríos y arroyos, poblados incomunicados, cortes de carreteras, derrumbes y caída de árboles, sobre todo en la zona norte del Istmo de Tehuantepec.
Desde la tarde de este martes, las poblaciones de la región istmeña comenzaron a resentir los efectos del fenómeno, con lluvias y vientos, ante los exhortos de las autoridades municipales y de Protección Civil.
En el poblado Mogoñé, de San Juan Guichicovi, se reportó el desbordamiento de un arroyo que desemboca en el río Malatengo, que inundó media docena de viviendas, desbordó la carretera Transístmica y causó un socavón sobre la vía estatal hacia San Juan Guichicovi.
Habitantes de la comunidad Tierra Blanca, de Santa María Chimalapa, pidieron el apoyo de las autoridades porque el río Chichihua se desbordó desde hace tres días y las pequeñas misceláneas se quedaron sin mercancías. “No tenemos para comer”, publicaron en redes sociales.
Mientras que vecinos del municipio de El Barrio de La Soledad, informaron que el río Chapala se desbordó y dejó sin paso vehicular entre ese municipio y Matías Romero. “Estamos incomunicados con nuestra propia tierra”, dijeron al no poder pasar.
En Matías Romero, los pobladores de la localidad Paso Guayabo, quedaron incomunicados por la crecida del rio y pidieron la ayuda de las autoridades para que se restablezca el paso vehicular hacia la carretera Transístmica.
Al respecto, la Coordinación Estatal de Protección Civil y Gestión de Riesgos (CEPCyGR) informó que se mantiene en “alerta máxima” a 130 municipios de las regiones Istmo de Tehuantepec, Costa, Sierra Sur, Sierra Norte y Cuenca del Papaloapan.
Esto porque de acuerdo con el Sistema de Alerta Temprana por Ciclones Tropicales (SIAT-CT), hasta el momento 130 municipios que se ubican al suroeste de Oaxaca se encuentran “en peligro medio por impacto de posible ciclón tropical y en alerta máxima por lluvias”.