Cd. de México.-
En los últimos días se viralizó en redes sociales el polémico caso de Marilyn Cote, una mujer que se presentaba como psiquiatra en México y Estados Unidos, promocionando servicios especializados en salud mental.
La situación generó un intenso debate, sobre todo por las declaraciones que Cote difundía en su página web, en las que se describía como “egresada del Centro de Desórdenes Mentales de la Universidad de Oslo” y mencionaba haber recibido premios internacionales en psicodiagnóstico.
Sin embargo, no se encontraron registros que confirmaran su vinculación con estas instituciones ni el reconocimiento de los logros que mencionaba.
De acuerdo con los anuncios que Cote compartía, su tratamiento de la depresión se destacaba por una promesa de curación en tan solo ocho días. Además, afirmaba tener la capacidad de prescribir medicamentos controlados a sus pacientes, sin una justificación adecuada.
La situación cobró mayor relevancia y dio un giro inesperado cuando se descubrió que, aunque Cote no era una profesional de la salud mental como afirmaba, sí poseía estudios superiores, aunque en una disciplina completamente diferente.
Según los registros de la Secretaría de Educación Pública (SEP), la supuesta especialista posee una Licenciatura en Derecho, obtenida en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), y cuenta con la cédula profesional número 3092101, la cual fue emitida en el año 2000.
Marilyn Cote cierra redes sociales tras ser desmentida
Luego de que su caso fuera descubierto por la cuenta en X @charlatenesmedicos, quien se encargó de desmentir las falsas afirmaciones que Cote promovía en sus plataformas, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) intervino y procedió a clausurar su establecimiento “Neuropsychology: Clinic Marilyn Cote”, ubicado en el consultorio 1706 de la Torre II, Piso 17 de las Torres Médicas Angelópolis, en el estado de Puebla.
Tras esto y ante la presión, la mujer se vio orillada a cerrar sus redes sociales, así como a dar de baja su página web. No obstante, la única cuenta que se mantiene activa es la de YouTube, aunque desactivo los comentarios.
A pesar de que ya no cuenta con plataformas como Facebook e Instagram, varios usuarios continúan investigando y exponiendo diversas inconsistencias en las publicaciones que realizaba en ellas, como fotomontajes y ediciones mal hechas que la hacían aparecer como ganadora de diversos premios otorgados por instituciones internacionales.
Sin embargo, no todo quedó ahí, pues la situación se complicó aún más cuando la plataforma Doctoralia, en la que Cote afirmaba tener reconocimiento como profesional de la salud, se deslindó oficialmente de ella. Según la plataforma, la mujer no había tenido relación alguna con Doctoralia desde el año 2020, debido al incumplimiento de los estándares éticos y profesionales que la plataforma exige a sus usuarios.