Guadalajara, Jal.-
México vive su mejor momento en materia de turismo, como lo demuestra el crecimiento que registra esta industria, por arriba del promedio internacional, destacó la secretaria del ramo, Claudia Ruiz Massieu.
En el marco de la celebración del Día Mundial del Turismo, expuso que se trata de un vehículo para lograr el verdadero desarrollo comunitario, pues además de ser una industria en crecimiento, integra las tradiciones y atributos de la localidad a una cadena de valor que genera desarrollo económico.
Ante el presidente Enrique Peña Nieto, la secretaria de Turismo resaltó que México es pionero en la inclusión de las comunidades al sector.
“Es un medio para reducir la pobreza, logra el empoderamiento productivo de las comunidades al insertarlas en la cadena de valor turística nacional e internacional”, subrayó.
A su vez, mencionó que este sector genera empleos directos para más de tres millones de personas, es la primer fuente de empleo para jóvenes de entre 16 y 24 años y es el segundo sector con mayor participación de las mujeres.
Además, dijo la funcionaria, permite que las comunidades con vocación turística se consoliden como un polo de desarrollo en sus regiones.
Ejemplificó que uno de los casos de éxito para impulsar el desarrollo comunitario por medio del turismo es la marca de Pueblos Mágicos, que son localidades con atributos que los hacen distintos, lo que significa una oportunidad para el aprovechamiento turístico de la vida de una comunidad.
La marca de Pueblo Mágico fomenta el desarrollo sustentable de las localidades y mostró un impacto directo a más de cuatro millones de turistas, genera seis mil millones de pesos en derrama económica y beneficia a dos millones de familias mexicanas.
Sin embargo, explicó, a cuatro años de aprobación su rápido crecimiento exige un análisis para identificar avances y áreas de oportunidad y tras un diagnóstico de cada uno de los 83 pueblos mágicos se plantea un enfoque que permita su consolidación como herramienta de desarrollo comunitario.
Además de la importancia de reforzar la participación social, generar una agenda transversal para la coordinación interinstitucional e intergubernamental, la revalorización del territorio, la competitividad e inclusión productiva, la sustentabilidad ambiental y mecanismos de seguimiento, evaluación y rendición de cuentas.
“Es decir, de un programa con baja participación de la base comunitaria, se pasa a uno que la reconoce, la impulsa y la empodera; de un programa con acciones dispersas y desarticuladas se privilegia una agenda transversal, interinstitucional e intergubernamental; de un programa con poco reconocimiento de las diferentes dimensiones que enriquecen y le dan sentido integral a un territorio, se pasa a un programa que revalora su papel”.
Así, abundó, se cuenta con un programa que impulsa las diferentes dimensiones que generan competitividad con énfasis en capacidad de inclusión productiva, aunado a que se reconoce la prioridad de la sustentabilidad ambiental y ya existe una propuesta que apuesta al cumplimiento de objetivos y rendición de cuentas.
Añadió que la contribución económica del turismo aumentó su relevancia política, debido a que cada vez son más los países que dan un mayor peso al sector dentro de la planeación de sus políticas de desarrollo.
Agregó que el turismo es “un medio para reducir la pobreza, logra el empoderamiento productivo de las comunidades al insertarlas en la cadena de valor turística nacional e internacional”, es decir, explicó la funcionaria, genera puestos de trabajo, oportunidades de negocio e inversión, mayores ingresos y desarrollo en todas las regiones.
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