México, D.F.-
En México, cuatro de cada 10 directivos empresariales reconocieron que es común practicar sobornos y corrupción para ganar contratos, lo que ubica al país como el “campeón” a escala global en estos fenómenos negativos, reveló la firma de consultoría EY.
Al presentar el Estudio global sobre corrupción y fraude 2014, elaborado por la empresa, el director ejecutivo de EY, Bruno Blackmore, aseguró que tan profundo es el problema en el país que los directivos mexicanos justifican algunas acciones sobre este comportamiento no ético con el fin de que se mantenga o gane el negocio.
Por ejemplo, 4% de los encuestados dijeron avalar conductas como la alteración de estados financieros, otro 8% dijo estar dispuesto a dar regalos, 10% se manifestó por ofrecer entretenimiento, mientras que 14% comentaron que estaban conscientes de que ofrecer pagos redituaría a favor del negocio.
Sobre ese tipo de conductas, el representante de la firma consultora dijo que 32% de los directivos nacionales justificaría por lo menos alguna de las acciones anteriores, pues prevalece como interés el que la empresa gane.
Un aspecto donde México también sobresalió es que a 18% de los directivos consultados se les solicitó pagar un soborno en una situación de negocios, cifra que se ubicó por encima del promedio mundial, que fue de 11%.
De tal magnitud es el problema del soborno y la corrupción en México que en materia de percepción es uno de los pocos países donde ha crecido este fenómeno, mientras que en otras latitudes ha disminuido o permanecido igual.
En 2012, 60% de los directivos participantes en la encuesta dijeron que tenían una percepción de que el soborno y la corrupción se practican ampliamente en el país. Dos años después, esta cifra creció a 65%.
Ello revela que en México creció en 5% la percepción de estos dos fenómenos.
Lo contrario ocurre en América Latina, donde en 2012 56% de los entrevistados afirmaron tener una percepción de que había sobornos y corrupción en las empresas, pero en la encuesta de 2014 la cifra disminuyó a 54%.
A escala global la situación no fue muy diferente, pues 38% aducía este problema en 2012, mientras que para 2014 apenas creció a 39% la percepción.
“México subió cinco puntos porcentuales en cuanto a la percepción de que hay más soborno, lo cual es más alto que América Latina y lo visto en el promedio global, y esto se dio a pesar de que en el país se han llevado a cabo iniciativas en las empresas para evitar y combatir el problema”, comentó el directivo de EY.
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