México, D.F.-
Sin mencionarlos directamente, pero en una clara alusión a los candidatos del PRD, la Iglesia católica hizo un llamado a los jóvenes a no caer en sus “promesas tramposas” que incluyen el consumo de mariguana y wi-fi gratis.
En la editorial del semanario Desde la Fe, la Iglesia le dedicó su espacio a los jóvenes que van a votar por primera vez, a quienes les pidió no distraerse y reflexionar su voto, pero con una tendencia muy clara en contra de dicho partido político, al preguntarles de inicio: “¿Cómo generar confianza en un partido corrupto que, en la capital del país, ha propiciado el desprecio de la vida y la destrucción de la dignidad de mujeres jóvenes por la primacía de agendas abortistas asesinas de más de 135 mil seres humanos?”.
Los cuestionamientos, en los que no se menciona el nombre de ningún partido político coinciden con las acciones de gobierno del PRD, principalmente en el Distrito Federal, y con sus promesas de campaña que actualmente hacen a través de spots en radio y televisión de los perredistas.
En su editorial con el título “Tu primera vez”, la Iglesia católica recuerda que “cerca de 18 millones de jóvenes podrán votar por primera vez el próximo 7 de junio. De los 82 millones de ciudadanos registrados en el Padrón Electoral, 30% son jóvenes entre 18 a 29 años”, señala.
Un sector atractivo, continúa, lleno de esperanzas y anhelos, que lucha por un mundo mejor y un país más justo donde sus reclamos y carencias sean atendidas.
Posteriormente, les pide a los jóvenes no distraerse de aquello que es realmente importante. Y les pregunta: “¿Es digno de confianza afirmar el derecho a la salud de todos los hombres y mujeres y, por otro lado, manipular a los jóvenes para tolerar y regular el consumo libre de marihuana, causando gravísimos daños a la salud? ¿Qué opinan los padres de familia –que también votan– de esta intención criminal de causar daños irreversibles a sus hijos? ¿Lo permitirán impunemente?”.
Y continúa: ¿es ético prometer wi-fi gratis cuando es un derecho en el artículo 6º de la Constitución y garantizado por el Estado?
¿Es auténtico promover “comisiones de la verdad” cuando representantes populares son opacos, están sostenidos por el crimen organizado –como la “desgraciada pareja imperial de Iguala”– o cuando vemos a candidatos en la Ciudad de México chapulineando de jefaturas delegaciones a curules en la Asamblea Legislativa?
Después de dichas preguntas la editorial cierra, a manera de conclusión, afirmando que hoy más que nunca los jóvenes deben ser muy cuidadosos al emitir su voto por aquellos candidatos y partidos capaces de responder a los problemas de empleo y educación, que eleven la calidad de vida y de salud, motiven promesas reales para vivir en la certidumbre beneficiosa de todos los seres humanos, aun de los no nacidos.
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