Después de los ataques con granadas la noche del 15 de septiembre, policías locales detuvieron a tres sujetos que corrían por las calles cercanas y que correspondían a las características que gente que presenció el atentado reportó a los uniformados. Los tres hombres –cuyos nombres no se revelaron—fueron entregados a la Procuraduría General de Justicia de Michoacán (PGJM) que horas después los dejó en libertad por “no haber problemas con ellos”.
Igualmente, diez policías que tuvieron la orden de infiltrarse, vestidos de civiles, dentro de la gente que acudió a las celebraciones del Día de la Independencia, son investigados porque no se presentaron a trabajar ese día. La lista de todos esos uniformados fue entregada ya a los fiscales encargados de la investigación del atentado que dejó hasta hoy ocho muertos y 132 lesionados.
Así lo reveló el director de Seguridad Pública, Mario Bautista Ramírez, quien aceptó que si hubo impericia en la custodia y preservación del lugar de los hechos, ello fue producto de la crisis misma y de forma involuntaria. Indicó que en realidad ellos detuvieron en total a cinco hombres momentos después de los ataques, dos con motivo de una riña y los otros tres a petición de los quienes nos reportaron sus “características y los detuvimos unas cuadras abajo”.
¿Quiénes eran los que liberaron?
-Los dos que son detenidos entre Madero y Morelos, me refiere la policía que al momento de estar pidiendo el apoyo ellos estaban provocando una especie de riña. Se les somete y se les trae detenidos-, explicó el jefe policiaco.
-Los otros tres, por ahí la gente dice que ahí van corriendo, que son los que tal aventaron el artefacto y nos dan las características de ellos y los detenemos unas cuadras abajo. Los pusimos a disposición de la Procuraduría y ellos son los que están investigando, nosotros no-, añadió el funcionario.
“Los detenidos fueron investigados por parte de ellos (la procuraduría estatal); quiero pensar que fue dentro de los lineamientos que ellos tienen para hacerlo y ya posteriormente en el transcurso de la misma madrugada fueron regresados a la Policía Estatal Preventiva diciendo que no había ningún problema con ellos, que habían sido checados en todo su forma de ser. Esas son las cinco personas que nosotros detuvimos en ese momento, en ese lugar”, especificó el jefe policial.
Bautista Ramírez dio a conocer que él mismo entregó ya a los fiscales una lista de diez policías para ser investigados por haber faltado al operativo. “Entregue una lista de 10 elementos que estaban convocados a participar con nosotros como policías preventivos vestidos de civil y con un holograma bien identificado en el pecho, pero no se presentaron a trabajar ese día, esos nombres los tiene las autoridades. Esos elementos tengo entendido que están trabajando, pero se les investigará”.
Lo mismo que estos diez elementos que se encuentran bajo sospecha, el resto de los elementos policiacos que participaron en el operativo del Día del Grito de Independencia están recibiendo los citatorios para presentarse a declarar. El propio jefe policiaco comentó que él mismo irá a declarar en breve.
Sobre el video que captó imágenes de policías disputándose un detenido, aclaró que “ví el video en donde aparece ese cúmulo de personas y no identificó a nadie. Sí se ve que hay unos policías por ahí pero no puedo acertar qué estén haciendo ellos, la verdad los veo juntos pero no sé qué sea. Lo que reitero es que tuvimos a cinco detenidos y los pusimos a disposición de la procuraduría estatal. De espaldas no los identificó; quiero pensar que puede ser gente de la procuraduría del estado porque también ellos visten de negro, pero la foto es muy lejana”.
Sobre su actuación en el lugar del atentado, dijo que al momento de la detonación él estaba a unos 20 o 30 metros del lugar. “Estoy sobre la mitad de la avenida Madero, frente a Palacio de Gobierno, donde está la banda de guerra y mis escoltas. La misma gente me hace señas de que me acerque e inmediatamente nos colocamos en el lugar. Y yo soy la primer persona que llega al lugar y trato de acordonar el lugar, gritándole a la gente que se abran, que abran espacio para que puedan llegar todas las fuerzas de protección civil porque todavía no había nadie atendiendo a los heridos”.
Luego el mismo funcionario reportó los hechos directamente al gobernador Leonel Godoy Rangel, y regresó al lugar de los hechos. Ahí, personalmente ordenó acordonar el área, cerrar las salidas de carreteras y revisar vehículos sospechosos. Sobre la alteración del lugar de los hechos, dijo que nunca antes se había tenido un evento de este tipo aquí, y apuntó que de los dos uniformados que se lavan las manos en el lugar, uno de ellos es un paramédico y del otro por estar embozado no lo reconocía.
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