Valle de Chalco, Edomex. / Abril 19.-
El letrero de arroz, sopa y guisado, más una coca-cola, por 45 pesos fue lo único que se salvó, todo lo demás de la cocina económica quedó en el fango.
“No es justo, no es justo”, fue el lamento que repitió Sofía Carrera, mientras sacaba el lodo de su negocio, ubicado sobre la autopista México-Puebla.
“Todo mi esfuerzo se fue al lodo”, dijo fuerte para que la oyeran. Más de 150 mil pesos perdió en un abrir y cerrar de ojos.
Su negocio de techo de lámina está casi frente al boquete de 30 metros del canal de La Compañía. Fue de las primeras damnificadas y hasta el mediodía de este lunes, nadie la había ayudado.
En febrero de 2010 también perdió todo. Sólo 20 mil pesos le dieron de compensación económica. Poco para resarcir los daños.
Leticia Cruz ha pasado por tres “canalazos”. En el 2000 perdió todo. En el 2010 perdió todo. La madrugada del domingo se quedó casi sin nada. Apenas hace 15 días recibió una sala nueva que sustituyó a la que se le echó a perder en el 2010.
“13 mil 500 pesos me costó y ya no sirve”, contó. Ahora la tiene que pagar casi sin usarla. La sala conserva el plástico que le pusieron para que no se empolvara, pero las aguas negras la destruyeron y la tiene que tirar.
Un equipo nuevo que adquirió para instalar una estética también lo tirará a la basura porque ya no sirve. Los 20 mil pesos que le dieron los gobiernos federal y estatal no le alcanzaron para renovar todos sus muebles.
Un cuarto “canalazo” ya no lo aguanta. “Estoy devastada”, confesó. Leticia quiere vender su casa, ubicada en la calle Norte 14, en la colonia San Isidro, pero no cree que se la compren, porque está en una zona de riesgo de inundación.
Arturo Castillo tampoco había recibido ayuda alguna de las autoridades al mediodía del lunes; no obstante, que su miscelánea está en la autopista donde pasaron todas las autoridades que acudieron a la contingencia.
Solo con su familia sacó de su tienda todo lo que tenía que vender a su clientela. No espera que le den ayuda económica porque en el 2010 no recibió nada. Está en la ruina, pero el sentimiento que tiene a flor de piel es el coraje porque nadie actuó para evitar la tragedia, su tragedia.
Marcela Castañeda, es otra habitante de Valle de Chalco, que no recibió compensación en el 2010 y ahora tampoco cree que la incluyan en el padrón de damnificados.
“Les dieron a todos 2 0 mil pesos, a mí no me dieron nada, pero no me servirán de mucho porque lo que perdí fue más que eso”, denunció.
Marcela y su familia durmieron en la azotea de su casa en la colonia San Isidro la noche posterior a la inundación. Colocaron una lona y ahí pasaron la noche por miedo.
Los pocos enseres domésticos que salvaron los mantienen a cielo abierto en la parte superior de su vivienda.
“No nos vamos de aquí porque desde la madrugada del domingo pasaron hombres que querían meterse a robar a nuestras casas y llevarse lo poco que nos quedó, por eso decidimos pasar la noche en la azotea”; narró.
Sonia Álvarez sí salió en busca de guarecerse. Dejó su casa porque la tercera inundación terminó por dañar los cimientos que construyó de manera provisional.
”Si me quedo podría caerse el techo, ya no es seguro. Tenemos miedo y no queremos pasar por esto otra vez. Nos vamos a otro lugar donde no haya peligro”.
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