México, D.F.-
El Ejecutivo federal puso sobre la mesa el paquete de leyes secundarias de la reforma energética, cuyos puntos medulares son la reducción de la carga fiscal a Petróleos Mexicanos (Pemex) y el aplazamiento de la llegada de gasolineras extranjeras al país.
Los secretarios de Hacienda, Luis Videgaray, y de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, fueron los encargados de esbozar los primeros detalles de las 21 leyes secundarias.
En el documento entregado al Senado destaca la pretensión de bajar la carga fiscal a Pemex de 75% a 65%. Esto va a permitir, según los textos, que la paraestatal pueda reinvertir las utilidades.
Al respecto, Videgaray comentó que “ha llegado la hora de que la Secretaría de Hacienda saque las manos de la administración de Pemex y de la CFE”.
El proyecto de la legislación secundaria también prevé que la venta al público de petrolíferos [gasolinas y diesel] a través de empresas diferentes a la Franquicia Pemex se autorice a partir de enero de 2018, cuando se podrán instalar estaciones de servicio nacionales y extranjeras que comercialicen el combustible.
En este nuevo esquema de venta se considera que las alzas mensuales al precio de los combustibles estarán vigentes hasta el cierre de 2014. Entre 2015 y 2019 Hacienda fijará el costo conforme al comportamiento de la inflación.
En los documentos se reafirma el principio constitucional de que la propiedad de los hidrocarburos es de la nación, pero se da paso a una apertura en todas las actividades del sector, tanto petroleras como eléctricas.
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