Monterrey, N.L. / Octubre 8.-
“No queda mas que salir persignados y arrepentidos de la casa, porque no sabes si vas a regresar”, fue una de las expresiones de un paseante de la Plaza Comercial Morelos de esta ciuidad, al detenerse por unos minutos en el lugar donde el cuerpo de Lucila Quintanilla Ocañas cayó abatido.
Ayer por la noche ciudadanos se dieron cita en el sitio donde colocaron varias veladoras formado un corazón en memoria de la joven de 21 años, y hoy esa figura se ha transformado; la cantidad de velas, flores rojas y blancas se ha incrementado por la solidaridad que los regiomontanos han mostrado ante el fatal hecho. Además fue colocada una fotografía de Lucy.
Más de 12 personas realizan guardias por minutos, mientras otros se persignan y rezan una oración.
La afluencia de gente por este paseo es normal y los comercios ya abrieron sus puertas a temprana hora, sin embargo, el nerviosismo por parte de los vendedores esta latente.
Alrededor de las 15: 00 horas el cuerpo de Lucy será trasladado al Panteón Dolores, ubicado en el municipio de Monterrey.
Quintanilla Ocañas era estudiante de la Facultad de Artes Visuales de la Universidad Autónoma de Nuevo León. Meses atrás dos alumnos de posgrado del Tecnológico de Monterrey, también inocentes, fueron abatidos en un enfrentamiento entre soldados y sicarios.
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