Rigoberta Menchú alienta la lucha por la identidad indígena

Mérida, Yuc.-
La premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta Menchú Tum, aseguró que hay temor de que los indígenas se unan y capaciten, que conozcan leyes o se conviertan en abogados, porque de esta manera son vistos como un “peligro” en su lucha por abatir la pobreza, la discriminación, el racismo, etc.

En el marco de una conferencia que ofreció dentro del Festival Internacional de la Cultura Maya, Menchú dijo que en Guatemala y gran parte de Centroamérica se ha logrado abatir los casos de discriminación a los indígenas y también la victimización a los pueblos étnicos; mediante la Academia de Lenguas Mayas, presentando denuncias, muchas de las cuales han logrado ganar.

Menchú Tum también sostuvo que es insostenible la pobreza no solo en los grupos mayas, sino en cualquier ser humano; “No puede permitirse la pobreza extrema, la desnutrición y la marginación no a los indígenas sino a cualquier ser humano”, acotó.

Dijo que es necesario seguir trabajando para preservar la identidad de los mayas, de los indígenas, pero también es necesario que los indígenas sigan estudiando leyes y aprendiendo para ayudar a los grupos étnicos a vivir sin racismo, sin rechazo y odio de sociedad no indígena. Dijo que hay una percepción de una parte de la sociedad no indígena que observa como un peligro que los mayas se unan, que los indios se puedan juntar.

Luego reconoció la importancia del Festival Internacional de la Cultura Maya que se realiza en Yucatán porque es un espacio de reflexión que permitirá crear una agenda integral para el futuro.

Sostuvo que adoptar lo que es la cultura y civilización maya es una forma de vida, es una forma de saber cómo se quiere vivir. Por otro lado, rechazó la creación y fomento de armas químicas que solamente fomentan la guerra y el enfrentamiento y alejan a los pueblos de la paz.

Entre otras cosas, pidió que la juventud tome decisiones sobre investigación en la civilización maya y es una forma que las nuevas generaciones se identifiquen lo que han hecho nuestros ancestros.

Repitió que hay pueblos en donde los intereses materialistas por el oro, la plata y el petróleo y esto provoca agresión, marginación y abuso sobre etnias y mayas en general.

Consideró que la pobreza extrema y la desnutrición crónica, sea maya o no, debe condenarse hacia cualquier ser humano; “No podemos sacrificar al ser humano a la extrema pobreza y el abandono, a la desnutrición”.