Monterrey, N.L. / Febrero 19.-
Siempre hay conocidos o personas cercanas a unos que se quejan del servicio del Seguro Popular.
En este caso está el testimonio de María del Carmen Rodríguez, de 34 años, quien no quedó satisfecha con el servicio que recibió el 16 de febrero.
Carmen es trabajadora domestica y trabaja para una casa ubicada en el municipio de San pedro.
Su sueldo es de mil 200 pesos a la semana aproximadamente, esto si ella no falla al trabajo, ya que si no se presenta a trabajar se le descuentan 200 pesos por día.
Carmen requiere del servicio del Seguro popular para su salud y la de su familia. Tiene dos hijas de 5 y 8 años y le ayuda a su esposo en los gastos del hogar.
María Del Carmen contó su experiencia en el Seguro Popular, “es horrible” asegura, ya que tuvo que acudir a este debido a que su hija menor se enfermó de gripa y temperatura.
La cita se las dieron a las 16:00 horas y no fue hasta las cinco que las atendieron. Nos cuenta que “los horarios nunca son lo que dicen, si se te pasa la cita no te atienden y si llegas puntual se te va todo el día ahí esperando”.
Mencionó que en sus citas previas a la del miércoles el servicio es igual de lento. Carmen es cliente frecuente del seguro popular y por lo tanto ya tiene sus citas calendarizadas.
En estas citas a las que acude cada mes, asegura que muchas veces no la atienden como deberían, ya que ella va para que la revisen y las que atienden leen su expediente y sólo le recetan los medicamentos que necesita sin ver si hay mejoramiento en su estado de salud o si este ha empeorado.
Cuando se le preguntó sobre aspectos positivos sobre el servicio que ofrece el seguro popular nos dijo que hay enfermeras muy amables, así como hay otras que no lo son tanto y que lo mismo sucede con los doctores.
También mencionó que siempre que habla le dan cita, aunque no se cumpla con el horario de cita siempre hay disponibilidad porque es para el servicio de la comunidad.
Redactó Adriana Vargas (LCC) del ITESM.-