México, D.F.-
Alrededor de 850 personas avanzaban sobre Calzada de Tlalpan, a la altura de San Antonio Abad, con dirección hacia el Centro Histórico, para exigir justicia a ocho meses de la desaparición de los 43 jóvenes normalistas de Ayotzinapa Guerrero.
El contingente valoraba por donde continuar su paso, debido a que granaderos intentaban frenar su marcha antes de ingresar al bajopuente de Tlalpan que conduce al Zócalo capitalino.
Encabezados por familiares de los 43 normalistas, los manifestantes realizaron dos pausas, una en la estación Villa de Cortes y otra en el cruce de Viaducto y Tlalpan, haciendo un pequeño mitin en cada uno.
Felipe de la Cruz, uno de los voceros de los familiares, indicó que no cesarán las movilizaciones, hasta que sean localizados los jóvenes. “Seguimos en pie de lucha, hasta encontrarlos”, señaló.
Sobre el hartazgo en el que han caído las movilizaciones ante los capitalinos, de la Cruz los exhortó a que se sensibilicen ya que como familiares seguirán buscando.
Los manifestantes amagaron a las autoridades de que no permitirán las elecciones, mientras sigan sin saber del paradero de los 43 normalistas, así como de que sigan represiones en contra de los mexicanos.
En esta marcha, que partió de las inmediaciones del metro Taxqueña, participan integrantes de la Coordinadora de Trabajadores de la Educación del Estado de Guerrero (CETEG), Acampada Revolución, FECSM, Congreso Popular del Distrito Federal, Frente Popular Francisco Villa, Coordinadora 1ro. De Diciembre y Comunidades del Valle de Anáhuac por Ayotzinapa.
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