La velocidad alcanzada por la violencia no tiene precedente. En los últimos 60 días, el promedio de muertos derivados de la lucha contra el crimen organizado es de 16.6 cada 24 horas, un muerto cada 85 minutos.
En este periodo la cifra de víctimas rompió récord, al ocurrir 987 homicidios; 10 de las víctimas eran menores de edad y 68 ocupaban puestos de mando o eran agentes de las diferentes corporaciones policiacas.
En lo que va del año suman ya 3 mil 4 homicidios. La cifra de los primeros 2 mil muertos de 2008, de acuerdo con estadísticas diarias de EL UNIVERSAL, se alcanzó el pasado 4 de julio. De ahí en adelante, la racha de homicidios ha sido imparable en la mayor parte de los estados del país, principalmente en Chihuahua y Sinaloa, entidades que se mantienen a la cabeza.
El pasado agosto ha sido el más violento en el año, con un registro de 547 asesinatos.
En 2007 la cifra de fallecidos en hechos ligados a la delincuencia organizada cerró con 2 mil 673, cifra que se superó este año desde el 5 de junio.
Esta espiral de violencia alcanzó a Yucatán, considerado uno de los cinco estados más seguros a nivel nacional, y que hasta julio sólo tenía registrados cuatro homicidios. Sin embargo, el pasado 28 de agosto fueron hallados 12 cuerpos decapitados y con huellas de tortura, 11 en la Comisaría de Chichi Suárez, en Mérida, y otro en el municipio de Buctzotz.
El único antecedente que se tenía de decapitados en serie ocurrió el 6 de septiembre del 2006, cuando en un bar llamado Sol y Sombra, cercano a la central camionera de Uruapan, Michoacán, varios hombres armados irrumpieron con disparos al aire para someter a los asistentes y luego arrojaron al centro de la pista de baile las cabezas de cinco hombres.
Los cinco días posteriores al hallazgo de los cuerpos cercenados en Yucatán se reportaron más decapitados en el país; el viernes 22, en Sonora fueron hallados los cuerpos de tres hombres; al siguiente día, en Durango dos mujeres fueron degolladas. El domingo pasado fue hallada la cabeza de un ganadero, que dos días antes había sido levantado, y el lunes un empresario tabasqueño fue decapitado.
De julio a la fecha, cada día se han cometido al menos cinco homicidios, siendo el 18 de agosto el más violento, con 28.
En lo que va del año, en Chihuahua van mil 194 homicidios; le sigue Sinaloa como el estado con más violencia, donde suman 567. Baja California tiene 168 y Durango 164.
Ayer, un policía federal y dos presuntos secuestradores murieron en un operativo en Villa Nicolás Romero, estado de México; en Sinaloa ocurrieron seis homicidios; ocho más en Chihuahua, dos en Zacatecas y uno en Durango.
De los hombres ultimados en Sinaloa, uno de nombre Juan Carlos tenía 17 años de edad y se presume vendía drogas al menudeo en Mazatlán.
Hombres armados lo balearon cuando en compañía de otro menor, de la misma edad, caminaban por la colonia Ampliación 20 de Noviembre. El otro adolescente fue herido.
En hechos diferentes, cinco personas más fueron asesinadas en territorio sinaloense.
Frente a una escuela primaria de Ciudad Jiménez, Chihuahua, fue acribillado a balazos Tomás Beltrán, quien viajaba en una camioneta tipo pick up. Los hechos ocurrieron a las 12:20 horas, cuando los alumnos estaban en clase.
En Ciudad Juárez, la ciudad con más violencia del país, se reportaron tres homicidios; otros dos tuvieron lugar en Guerrero, donde las víctimas fueron abandonadas en un vehículo Yukon, y dos más en los municipios de Uruachi y Parral.
Dos cadáveres fueron encontrados en Zacatecas y uno más en Durango.
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