Monterrey, N.L.-
Realizar cualquier trámite relacionado con el registro de una propiedad es hasta hoy sinónimo de procesos lentos y engorrosos. De inmediato se enfrenta con un largo expediente y la necesidad de cargar documentos, duplicados y otros comprobantes para poder completar la tarea.
Actualmente, hay 4 leyes que regulan estos trámites y tienen más de 44 años sin actualizarse, por lo tanto, hay una desconexión entre la manera en que se pensaron estos procesos y las necesidades de quienes tienen hoy, un tiempo limitado para realizar trámites.
El Instituto Registral y Catastral de Nuevo León ha identificado la oportunidad de mejorar esta situación para miles de personas en el estado e impulsa una iniciativa que crea una nueva Ley de Registro Público Inmobiliario y de Catastro que integre en una sola norma lo que hoy se encuentra en al menos cuatro disposiciones.
El objetivo de la fusión es facilitar la gestión de trámites para los ciudadanos, que podrán hacer uso de nuevas tecnologías para evitarse los largos expedientes, además de integrar medidas de seguridad como la firma digital y el llamado folio real, un elemento de identidad único que aporta seguridad para que cada persona pueda llevar control de las operaciones relacionadas con su patrimonio inmobiliario.
Esta iniciativa es el resultado del proceso de consultas y trabajo conjunto del Instituto con otros participantes del sector como la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), la Cámara de Propietarios de Bienes Raíces (Caprobi), el Colegio de Notarios, la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) y la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
Un intento previo por modernizar el sector fue presentado hace un año, sin embargo, la iniciativa no fue discutida ni votada por el Congreso del estado, por lo que se espera una mejor respuesta del legislativo en esta ocasión.