Monterrey, N.L.-
Por medio de redes sociales, vecinos del Casco de San Pedro Garza García y el Centrito Valle manifestaron su rechazo a la intención de las autoridades municipales de deforestar la zona como parte de los trabajos de “embellecimiento”.
En su mensaje, los colonos explicaron que las autoridades están talando árboles maduros y sanos que, consideran, no cumplen con los requerimientos estéticos para el proyecto que realizan y que ha ganado múltiples críticas y reclamos.
“Estamos en contra de la tala de árboles so pretexto de ganar uniformidad en el arbolado del nuevo diseño urbano o bien, que los árboles maduros actuales resultan incompatibles con las instalaciones subterráneas por implementar.
“¿No será que no han invertido más en ingeniería para sus proyectos?”, cuestionaron.
Los vecinos explicaron que el contexto hídrico de la zona metropolitana ha cambiado por lo que cualquier árbol que acaba de ser plantado tardará más tiempo en madurar porque las condiciones han cambiado.
“Hoy día, dado el cambio climático, la necesaria racionalización del agua y la contaminación del aire cada vez más peligrosa, nos debe hacer detenernos para preguntarnos qué queremos: ¿árboles maduros que combatan el dióxido de carbono hoy día en este contexto ambiental? o ¿queremos avenidas peatonales estéticas con una arborización homogénea que madurará en algún momento de la historia?.
“Todo indica que primero está la agenda política que la agenda del derecho a un ambiente sano. La administración municipal se preocupa por la contaminación derivada de la Planta Pemex de Cadereyta, pero no se preocupa por el hecho de que dos distritos se van a quedar sin arboles maduros por varios años. No tiene respeto por el derecho a un ambiente sano”, indicaron.
Incluso recordaron que este tipo de proyectos ya han fracasado en San Pedro Garza García.
“Veamos la experiencia obtenida: En el proyecto de Nuevas Calzadas talaron un sinfín de árboles ya maduros ya sea por un afán de uniformidad o bien, porque sus raíces estropeaban la infraestructura subterránea recién realizada. Dos años y medio después, tenemos la famosa infraestructura subterránea, pero 85 de los nuevos 300 sicomoros sembrados en las Calzadas, se han tenido que talar porque se secaron tienen algún tipo de plaga y están estresados por la falta de agua.
“Digamos no a la tala de árboles maduros, hay que salvarlos porque los nuevos van a tardar mucho tiempo en darnos oxígeno, sombra, microclima y calidad de vida” sentenciaron.