Monterrey, N.L.-
Con la oficialización de que el América disputará la ida de la Gran Final como local en el Estadio Cuauhtémoc, hay que remontarnos 32 años en el pasado para recordar la última vez que se disputó una final en ese estadio.
Inaugurado en 1968 y dos veces mundialista, el Estadio Cuauhtémoc volverá a ser sede de una final, pese a que no sea de los Camoteros.
En la temporada 1991-1992, la franja consiguió meterse a la disputa por el título luego de una gran liguilla en la que eliminaron a las Chivas de Guadalajara y al Necaxa, sin embargo, en la final cayeron 2-0 en el global y perdieron la oportunidad de volver a ser campeones.
Esa ocasión marcó la última vez que la Angelópolis vio disputarse una serie de la final del futbol mexicano. Ahora, volverán a estar en el ojo del país cuando el Monterrey visite a América en el histórico Estadio Cuauhtémoc.
¿Por qué no van a jugar en la CDMX?
Desde la fase regular, la alcaldía Benito Juárez dio un ultimátum a las directivas de los equipos y a la Plaza de Toros, en donde se les prohibió realizar dos eventos masivos al mismo tiempo y este 12 de diciembre, fecha del partido de ida, se realizará una tradicional corrida de toros en la plaza.
Ante esto y para evitar conflictos, la directiva del América solicitó el cambio de sede a un estadio cercano, en este caso, el de Puebla, ubicado a alrededor de dos horas de la capital del país.
Luego de la ida el jueves 12, la vuelta se llevará a cabo el domingo 15 de diciembre en la cancha del Estadio BBVA, donde se definirá si los azulcremas consiguen el tricampeonato o el Monterrey logra su sexto título.
