Monterrey, N.L.-
En total 22 integrantes del Poder Judicial de la Federación en Nuevo León anunciaron su renuncia a los cargos ante la posibilidad de aparecer en una boleta electoral para intentar mantenerse en el cargo, tal y como lo ordena la recientemente autorizada reforma constitucional.
Los magistrados y jueces, aseguraron que “la dignidad tiene un precio muy alto y los dignos no aceptan rebajas”, por lo que realizaron un acto que denominaron “Serví con honor, declino con dignidad”.
Felisa Díaz-Ordaz Vera, ahora ex magistrada, reconoció que la decisión es muy triste para ellos y, por ello, más de la mitad de los magistrados decidieron presentar sus renuncias.
“Más de la mitad de los juzgadores de la federación manifestamos nuestra decisión de no participar en la infame elección de titulares conseguida maliciosamente por el grupo en el poder, muchas ilusiones se vieron truncadas, muchos sueños dejaron de ser soñados porque las nuevas condiciones en las que se deberá administrar la justicia resultan muy desalentadoras que obligaron a tomar la decisión que acabará con nuestras carreras”, dijo.
Otros de los magistrados que presentaron su renuncia y superan los 20 años de servicio son Héctor Guillermo Maldonado y Antonio Ceja Ochoa.
Maldonado es recordado, entre otras cosas, por haber otorgado el amparo que detuvo la clausura de la refinería de Cadereyta que el gobierno de Nuevo León pretendía aplicar por supuesta contaminación.
Por su parte Ceja Ochoa enfrentó una denuncia penal ante la Fiscalía General de la República interpuesta por Banco Santander quien lo acusó de conductas contra la administración de la justicia en el caso de una demanda interpuesta por las hermanas María del Carmen, Gabriela y Viviana Garza Delgado, hijas del empresario Roberto Garza Sada.