Río de Janeiro, Brasil.-
El estado recibe los Juegos Olímpicos con un salvavidas en su presupuesto económico. La administración federal le dio a Río de Janeiro 900 millones de dólares luego de que Francisco Dornelles, gobernador en ejercicio, quien reemplaza a Luiz Fernando Pezão, decretó en junio la emergencia económica y definió un “estado de calamidad pública”.
La entidad está quebrada a causa de la baja del precio del petróleo y del endeudamiento gigantesco al que se sometió en los últimos años. La economía brasileña, atada a la de China, cayó 3.8% en 2015 y se espera que retroceda 3.3% este año.
Hay un 11.3% de desempleo, lo que en Brasil es una cifra récord: 5 millones de personas perdieron su trabajo entre 2014 y 2016.
Además, 11% del presupuesto de Río de Janeiro está destinado a pagar deudas y eso es más de lo que tiene asignado para la enseñanza, salud y seguridad pública. Por un criticado plan de inversiones con exención de impuestos no cobra 138 millones de reales por año (unos 46 millones de dólares).
“Para hoy esperamos un día intenso y con protestas”, dijo Leandro Uchoas, miembro del cuerpo técnico de la Asamblea Legislativa de la ciudad de Río de Janeiro y del partido de izquierda PSOL, a EL UNIVERSAL.
“La mayoría de los cariocas desaprueba a [el mandatario interino Michel] Temer. Algunos quieren que vuelva Dilma [Rousseff] y el resto está en contra de todos”, declaró.
Rousseff, presidenta suspendida, no estará en la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos, al tiempo que la presencia de Temer en el Maracaná estará muy acotada con un discurso que no deberá superar los 10 segundos. Se espera que la cobertura del evento cuide al jefe del Ejecutivo elevando el volumen de la música circunstancial para tapar los abucheos.
Cerca del Maracaná, en la Plaza Sáenz Peña, se reunirán los manifestantes. “La cuestión es cómo lidiar en Río de Janeiro con las manifestaciones, que son vistas por la policía local como una práctica criminal que merece una represión violenta”, dijo a EL UNIVERSAL Luiz Eduardo Soares, antropólogo y ex funcionario de Río de Janeiro.
El temor por un atentado se respira poco, pero, en total, los agentes de las fuerzas de seguridad, 85 mil, duplican a los de Londres 2012.
Los Juegos Olímpicos están aquí, pero todavía se discute cuánto le van a costar material y simbólicamente a Río. De acuerdo con la Autoridad Pública Olímpica, su valor es de 39.1 mil millones de reales: 12 mil millones de dólares. En 2009, ese número era menor en 10 mil millones de reales.
El Comité Popular de la Copa y las Olimpiadas mostró que 62.1% del gasto viene del sector público, un dato diferente al oficial, que indica que de esa área sólo se obtuvo 42.6% y que el 57.4% llegó del sector privado. “La diferencia es por una serie de motivos; en especial, la donación de terrenos públicos para la construcción privada”, dijo un vocero de la ONG Justicia Global.