Reynosa, Tamps. / Enero 14.-
En los últimos cuatro días fueron deportados de Estados Unidos más de 300 migrantes, lo que causó una protesta de la Iglesia católica, pues fueron liberados ligeros de ropa pese a la onda gélida que azota esta entidad.
El vicario Hilario del Pozo Noyola, encargado de la Casa del Migrante de la Iglesia de Guadalupe, aseguró que tan sólo el pasado fin de semana, cuando se registró la mas intensa onda gélida, Estados Unidos deportó a casi 200 personas y todas venían sin abrigo; la mayoría de ellos, dijo, buscaron refugio en dicho albergue.
“Las condiciones en que son liberadas las personas deportadas no son las mejores ya que traen el mínimo de ropa, quedando expuestos hasta a poder morir por las gélidas temperaturas”, indicó.
El vicario señaló que la mayoría de los migrantes a quienes se les dio refugio el pasado fin de semana, y los que han sido deportados durante la presente semana, tenían como objetivo regresar rápido a sus lugares de origen, ya que manifestaron que nunca habían sentido un frío tan intenso.
Detalló que en los últimos días suman más de 300 indocumentados deportados, mientras que la Casa del Migrante de la Iglesia de Guadalupe ha brindado atención a casi el 60 por ciento de éstas personas.
Señaló que es urgente que el Consulado de México lance un llamado a las autoridades del vecino país para que se ponga un freno a esta forma inhumana de deportar a las personas y evitar así fallecimientos por hipotermia.
Del Pozo Noyola manifestó que durante estas fechas seguirá la deportación masiva de migrantes, por lo que pidió ayuda a la población para que donen chamarras y cobertores que permitan darles cobijo a estas personas indocumentadas.
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