Reynosa, Tam.- Aunque la tienen lista y preparada para recibir indigentes y personas en estado vulnerable que deambulan por las calles, a la Casa del Ingente hasta los mismos vagabundos le han hecho “el feo”.
Samuel Ramírez, de 70 años y originario de Michoacán, actualmente deambula por las calles de esta ciudad fronteriza, pero señala que a la Casa del Indigente sólo va a comer y al baño, no la usa para quedarse.
“Me dicen que venga y yo vengo , como, voy al baño y me ‘pelo”’ de volada”, expresó el indigente.
Cabe señalar que este albergue comúnmente luce cerrado en su exterior, y esta semana, a petición de autoridades de Protección Civil, abrió sus puertas.
Oficiales de bomberos pidieron a los encargados de la Casa que abriera sus puertas debido a los frentes fríos que se han venido registrando, informó Gustavo Torres, encargado voluntario del albergue.
“El equipo de bomberos vino y nos pidió que empezáramos a recibir personas de la calle que no tienen un lugar para protegerse de las bajas temperaturas.
“Realizamos limpieza para que todo este impecable y así dar entrada a la gente que los mismos rescatistas de Protección Civil y Bomberos traen aquí”, dijo.
Torre comentó que el pasado frente frío la Casa albergó a nueve personas, ya que la gran mayoría de los indigentes se niega a pasar la noche en el refugio.
“Cuando no se quieren venir a quedar, lo que se hace es llevarles cobijas para que se cubran”, mencionó.
Indicó que dentro de las atenciones que aparte de darles acilo los días que ellos deseen, también les dan comida.
Discussion about this post