REYNOSA, TAM.- Mostrando un incomprensible cinismo, la madre y padrastro de Pepito, el pequeño José Eduardo, quien se debate entre la vida y la muerte en el Hospital General tras haber recibido una golpiza, reconocieron el abuso que durante meses ejercieron sobre el menor.
José Luis González Miguel, de 21 años de edad y padrastro del menor, reconoció que fue él quien se encargó de golpear al pequeño en esta ocasión debido a que “era muy chillón”.
“Le pegué mucho porque lloraba mucho y no se callaba”, indicó tras las rejas de la Dirección de Seguridad Pública, donde se encuentra detenido.
González Miguel, quien es un consumidor confeso de enervantes y que al momento del ataque se encontraba borracho, quiso atenuar los hechos asegurando que fueron ellos quienes llevaron al niño al hospital.
Por su parte, Juan Antonia Linares Sánchez de 22 años y madre del pequeño, negó haber golpeado en esta ocasión a su hijo, sin embargo reconoció haber abusado de él en otras ocasiones, además de haber permitido que su pareja atacara al pequeño.
La pareja está detenida y en espera de que se ejerza acción penal por el abuso que ejercieron no solamente sobre José Eduardo, sino sus otros dos hijos quienes ya fueron rescatados por el DIF.
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