Obreros despedidos
vuelven a manifestarse

Reynosa, Tamps. / Feb. 5
Con pancartas en mano y la exigencia de justicia, decenas de obreras de la maquiladora Nokia salieron nuevamente a las calles y se instalaron frente a las instalaciones de la empresa en protesta por los despidos injustificados que se suscitaron durante los meses de noviembre del año pasado al mes de enero del año en curso.

Apenas el día de ayer el grupo de trabajadores acudió a la Junta de Conciliación y Arbitraje a manifestar su descontento por los términos en que fueron despedidos.

Los inconformes aludieron que desde 7 de diciembre del año pasado, la empresa ha despedido a más de mil trabajadores a quienes se les obligaba a firmar una renuncia voluntaria con una liquidación de ochocientos pesos, e hicieron saber que algunos de los obreros desocupados aún no habían concluido el contrato laboral y aseguraron que las liquidaciones se encontraban plagadas de irregularidades.

Y es que al haber sido contratados por medio de dos agencias de colocación como Adecco y Manpoweer, los trabajadores dijeron que la compañía manufacturera se había deslindado de responsabilidades con los obreros despedidos.

Así lo explicó Paul Aguirre Ochoa, uno de los afectados, quien exige a la maquiladora hacerse responsable del pago de su liquidación.

"Jurídicamente la relación obrero-patronal no se puede deslindar porque el centro de trabajo era Nokia. Alguien tiene que responder por las indemnizaciones", dijo Aguirre.

El pago desproporcional de las liquidaciones no es la única inconformidad, lo es también la falta de apoyo que los obreros han tenido por parte del secretario del sindicato interno de Nokia Jesús Víctor Martínez, quien aludió no haber sido notificado oficialmente de los despidos.

"No se había oficializado ante el sindicato, nuestros compañeros desconocían que deben de estar yendo con esos problemas al sindicato directamente… el sindicato no había tomado acción porque no se habían acercado con nosotros", comentó el secretario general del Sindicato.

Más de diez obreras despedidas están embarazadas, al quedar sin empleo perdieron los beneficios médicos del Seguro Social, por lo cual exigen que además de pagarles la liquidación completa, se les otorguen los servicios médicos, por lo menos hasta el final de su embarazo.

Luego de menos de una hora de protesta representantes de la empresa salieron a conversar con los líderes sindicales y las trabajadoras con quienes se comprometieron a resolver el problema en el transcurso de veinticuatro horas.