Reynosa, Tamps. / Marzo 15.-
Autoridades del sector salud manifiestan su rechazo a la aplicación de pesticidas que el gobierno de Estados Unidos contempla rociar en las márgenes del río Bravo a efecto de eliminar la maleza y las plantas de carrizo por considerar que permiten que los migrantes se oculten.
El titular de la cuarta jurisdicción sanitaria de la Secretaría de Salud en esta frontera, Juan Noé López Soto, dijo que de proceder las autoridades de la patrulla fronteriza a arrojar pesticidas o herbicidas se tendrían efectos negativos no sólo en las poblaciones fronterizas sino en municipios aledaños.
Refirió que esta medida resulta “irresponsable” dado que en su afán de impedir que crucen migrantes hacia territorio estadunidense pueden afectar la salud de miles de personas así como de la flora y fauna.
Refirió que de acuerdo a versiones vertidas por el departamento de salud de Estados Unidos, el herbicida no es tóxico, pero el galeno advirtió que esta versión es falsa ya que si podría afectar la salud de la población.
Dijo que la aplicación de este pesticida puede causar desde alergias hasta cuadros agudos diarreicos y vomito a quien consuma la sustancia a través del agua contaminada.
Mencionó que diversas autoridades del estado, municipales y organismos defensores de derechos humanos así como grupos ambientalistas están manifestando su inconformidad con esta medida pues dijo que las poblaciones fronterizas se abastecen de agua del río Bravo.
“No estamos de acuerdo con esta medida y las autoridades de salud en el estado están manifestando su inconformidad al departamento de salud en Texas para que evite el gobierno hacer daño no solo a la flora y fauna del lugar sino a miles de habitantes de los municipios fronterizos de Tamaulipas” concluyó.
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