Reynosa, Tam.-
La ortodoncia es una rama de la odontología que se encarga de la corrección de los dientes y huesos posicionados incorrectamente y para lograrlo se apoya en varios tratamientos ortodóncicos.
“Además de beneficiar en la estética dental, también es funcional, ya que influye en la masticación o mordida de las personas, porque cuando no se tiene una masticación correcta se desencadenan otros problemas”, expresó Rafael Rodríguez, director del Instituto Profesional Odontológico Contemporáneo (IPOC Dental).
Explicó que una mordida deficiente puede presentarse, por ejemplo, cuando falta un diente, influyendo en la masticación y en cómo llegan los alimentos a nuestro estómago, provocando estreñimiento.
Una mala mordida también provoca problemas en la articulación temporomandibular, que es la existente entre el hueso temporal y la mandíbula, colocadas, una a cada lado de la cabeza.
Esto puede provocar problemas dentales y dolores de cabeza o en algunas zonas de la cara.
Uno de los tratamientos más conocidos y comunes para corregir estos problemas son los brackets, que actúan junto a un sistema de bandas y alambres, los cuales se colocan luego de la realización de varios estudios.
“En cada paciente se realiza un plan de tratamiento personalizado en base a radiografías, fotografías y unos moldes que se llaman modelos de estudio y con eso determinamos si es apto para el tratamiento”, explicó el especialista.
Añadió que, aunque generalmente son los jóvenes quienes se someten a este procedimiento, también hay adultos que usan brackets, aunque en ocasiones no les agrada por la cuestión estética.
Destacó la importancia de que los niños a partir de los 6 años los lleven a revisión, ya que en caso de presentar algún problema se someterán a una ortodoncia interceptiva, es decir, aquella que corrige desviaciones que se están produciendo en ese momento y pueden tratarse para cambiar su evolución.
Quienes usan brackets pueden experimentar un poco de incomodidad para comer, por lo que pueden existir algunas limitantes en el área alimenticia, sin embargo, se solucionan buscando alternativas para comer lo que desean.
“Yo le digo a los pacientes que se olviden de comer una manzana completa o un elote entero, porque sí afecta directamente, se puede caer un bracket y eso retrasaría mucho el tratamiento”, explicó.
Este procedimiento que tiene una duración aproximada de dos años o más, dependiendo del problema del paciente, implica poner especial atención en la higiene, mencionó el médico.
“El paciente con brackets es más propenso a acumular alimentos por tener un cuerpo extraño en la boca, por eso se le explica la técnica de limpieza con un cepillo especial para ortodoncia”, dijo Rodríguez.
Finalmente, el dentista recomendó a los pacientes acudir con un profesional y especialista en ortodoncia antes de someterse a dicho tratamiento.
“No se dejen atrapar por clínicas que solamente se dedican a pegar brackets, vayan con quien quieran, pero antes de un tratamiento de ortodoncia es necesario realizar estudios y recuerden que los brackets no son de adorno, no son un accesorio, sino un tratamiento muy delicado”, sentenció.