Reynosa, Tam.-
Daniel Radcliffe, conocido por interpretar a Harry Potter en la pantalla grande, tuvo de pequeño esta enfermedad y a pesar de esto logró ser una persona exitosa, lo que significa ser un claro ejemplo de superación.
La dispraxia o el “síndrome del niño torpe” es un trastorno del neurodesarrollo que afecta el movimiento y la coordinación en las personas.
Esto es debido a que los reflejos del cerebro que envía a los músculos son interrumpidos, lo que ocasiona problemas de movimiento y coordinación.
Así, las habilidades motoras se ven entorpecidas, van desde saltar hasta dificultades en el habla, así como un atraso en el desarrollo emocional.
Dificultades simples como para atarse los cordones de sus tenis, escribir con lápices, o hasta realizar movimientos complejos que requieren de una excesiva coordinación motriz.
Las causas de la dispraxia todavía no han sido totalmente esclarecidas. Una de las detonantes son las anormalidades en el desarrollo de las áreas cerebrales, vinculadas con la coordinación. Por lo general se deben a lesiones, enfermedades y traumatismos ocurridos durante la niñez.
Los síntomas comienzan a aparecer cuando un recién nacido tiene dificultades al darse la vuelta al estar acostados, al caminar o al comer lo hacen de algo entorpecida.
También se puede añadir el conflicto de mantener una postura firme, así como comportamientos inmaduros por dificultades sociales.
Esta enfermedad no tiene alguna cura, pero puede ser tratada con terapias que ayudan a la coordinación y movimiento.
Terapeutas ocupacionales pueden ser de gran utilidad, pues se encargan de habilidades finas y de la vida cotidiana, como usar tijeras o sostener un lápiz. También hay terapeutas físicos que pueden ayudar a trabajar la parte corporal).
Cabe señalar que la dispraxia no bloquea para nada el aprendizaje, por lo tanto cuando inician los tratamientos, puede haber un avance progresivo y los pacientes pueden llevar una vida de manera cotidiana. (Con información de Óscar de Jesús Pérez)
………………
Daniel Radcliffe had this deficiency: dyspraxia
By Jose Luis Montemayor
Reynosa, Tam.-
Daniel Radcliffe, known for playing Harry Potter on the big screen, had this disease as a child and despite this, he managed to be a successful person, which means being a clear example of self-improvement.
Dyspraxia or “clumsy child syndrome” is a neurodevelopmental disorder that affects movement and coordination in people.
This is because the brain’s reflexes to the muscles are disrupted, causing movement and coordination problems.
Thus, motor skills are hampered, ranging from jumping to speech difficulties, as well as a delay in emotional development.
Simple difficulties such as tying the laces of his tennis shoes, writing with pencils, or even performing complex movements that require excessive motor coordination.
The causes of dyspraxia have not yet been fully clarified. One of the triggers is abnormalities in the development of brain areas, linked to coordination. They are usually due to childhood injuries, illnesses, and trauma.
Symptoms begin to appear when a newborn has difficulty turning over from lying down, walking, or eating they do so somewhat hindered.
You can also add the conflict of maintaining a firm posture, as well as immature behaviors due to social difficulties.
This disease has no cure, but it can be treated with therapies that help with coordination and movement.
Occupational therapists can be very helpful, handling fine and everyday life skills, such as using scissors or holding a pencil. There are also physical therapists who can help work on the body part).
It should be noted that dyspraxia does not block learning at all, therefore when treatments begin, there may be progressive progress and patients can lead a daily life. (With information of Oscar de Jesus Perez)
