Reynosa, Tam.-
Cuando se escucha esta palabra, se viene a la mente las galletas que se cocinan para Navidad, pero el jengibre es algo más que eso, ya que en su haber tiene muchos beneficios para el cuerpo.
Por ejemplo, contiene gingerol, que son cercanos de la piperina y la capsaicina, que ayudan a padecimientos del estómago, como la inflamación y flatulencias, a su vez que funciona como un gran antiinflamatorio, eso sin olvidar que es el responsable de darle su tan característico picor a esta raíz.
Contiene una gran fuente de vitaminas como la C, la cual ayuda a que tener un sistema inmunitario sano, la B3 que ayuda a que las enzimas funcionen correctamente, la B6 la cual es para desarrollar el cerebro durante el embarazo, la B1 la cual hace que las azúcares de los alimentos se descompongan, la B2 que sirve para desarrollar las células del cuerpo, la B9 que es para que crezcan los glóbulos rojos y la E que se encarga de proteger a las células.
El jengibre también aporta algunos minerales como el manganeso y el fósforo, los cuales producen energía, el hierro que se encarga de producir hemoglobina, el magnesio que regula el sistema nervioso, el zinc que es para que el sistema inmunológico se defienda de bacterias y virus, el potasio para un buen funcionamiento de los riñones y el corazón y el calcio, útil para que los músculos se puedan comunicarse con el cerebro.
Dependiendo de cómo se prepare, el jengibre alivia ciertos padecimientos, si lo prepara en té, puede ayudar a disminuir el dolor de garganta y el escurrimiento nasal.
Esta raíz también es buena para los diabéticos, ya que les auxilia a controlar la glucosa en la sangre, a la vez que mejora la circulación, es por esto que es muy eficaz contra el tratamiento de las varices. (Con información de Ingrid Alejandra Nava/UT)