La circuncisión no es obligatoria, sólo se realiza por complicaciones infecciosas, aunque existen creencias de orden religioso que obligan ese tipo de cirugía.
Reynosa, Tam.-
Existen mitos y creencias religiosas sobre la eficacia o necesidad de realizar la circuncisión a los niños recién nacidos, mismas que fueron despejadas por el urólogo pediatra, Rogelio Gómez Loredo, quien resalta que no hay ninguna razón para hacer dicha operación.
La circuncisión es una cirugía en la que se efectúa un corte del prepucio, es decir la piel que cubre el glande o la cabeza del pene, y no hay ninguna razón para realizarla al nacer, a menos que haya complicaciones médicas que lo requieran, explicó Rogelio Gómez Loredo, miembro del Colegio Nacional de Urología.
El postgraduado del Centro Médico Nacional Siglo XXI detalló que en dicha operación se reseca y corta la piel que recubre el pene y que en un adulto es más intensa por la longitud de la herida y la cantidad de suturas, que en los niños.
Resaltó que no es necesario hacer una circuncisión siendo bebé, ya que pueden dejar una parte del prepucio.
“Hay varios métodos. Uno es echar la piel hacia atrás y hacer un corte inmediatamente por debajo de la cabeza en el glande y unos cuatro centímetros más abajo otro corte, se reseca todo ese manquito de piel y se pega borde con borde para dejar al descubierto esa parte genital” detalló el especialista.
Recalcó que lo anterior ayuda a mejorar la higiene de la persona, a mantener más seca el área y evitar infecciones, sin embargo, no se realiza sólo por deseos de los padres de familia o varones adultos, ya que deben existir complicaciones médicas e infecciosas para que se tome como medida de ayuda para recobrar la salud.
“Es mínimo el riesgo al realizar dicha intervención, porque es una anestesia local, dura alrededor de 40 minutos, el paciente entra caminando y sale caminando. Además no se requiere de tiempo de recuperación en el caso de los menores sólo mantener buena higiene, mientras que en los adultos como se realizan suturas, se recomienda suspender la actividad sexual de 10 a 14 días”, detalló el urólogo.
Enfatizó que se recomienda adquirir una instrucción sobre la manera correcta de asearse esa parte del cuerpo para evitar alguna infección, pues el padre debe de orientar al menor sobre la limpieza y la forma más higiénica de orinar.
“Hay una doctrina médica empeñada en realizar dicha operación en los menores al nacer, aunque esto no sea necesario por ninguna razón. Y pese a que es decisión de los padres, quienes lo quieren por presión social o creencias religiosas; son elecciones individuales que yo personalmente no recomiendo”, señaló el doctor.
El especialista comentó que en la escuela a la que él pertenece está prohibido hacer una circuncisión en niños y que en 26 años de experiencia sólo ha operado a cuatro menores y fue por fimosis.
“La fimosis es una complicación física en la que el prepucio no se puede bajar para descubrir el pene y eso hace imposible la limpieza y se requiere operar para evitar infecciones”, precisó.
Gómez Loredo mencionó otras complicaciones que se presentan en el pene, pero que son de índole menor en las que no se requiere de hacer una cirugía, como la circuncisión, una de ellas se denomina sinequias, que es cuando el prepucio se pega en la cabeza del pene y no baja.
Otra de menor intensidad que puede suponer que requiere la circuncisión, es la acumulación de esmegma en el prepucio; que provoca inflamación y enrojecimiento, pero no es infección; pues aseguró que en una consulta se realiza una limpieza y desaparecen las complicaciones.
“Hay mitos sobre que si se quita la piel que recubre el pene se pierde sensibilidad en el miembro y por consecuencia puede disfrutar menos las relaciones sexuales, sin embargo, son sólo eso, mitos. El órgano sexual en realidad es ordenado por el cerebro. Si el cerebro siente el 100 por ciento será el mismo porcentaje que sienta el pene”, expresó Gómez Loredo.
Externó que su postura al respecto de la realización de la circuncisión, es que se debe hacer sólo cuando es necesaria, en casos como: infecciones crónicas, mal olor y en pacientes diabéticos, ya que en esos casos cualquier tipo de infección puede acentuarse por la enfermedad.
El urólogo recomendó hacer ejercicio en el prepucio de los varones desde recién nacidos, ya sea durante el baño o cada vez que le cambien el pañal, dicho movimiento debe hacerse hasta donde quede descubierta toda la cabeza del pene.
“Otra recomendación es que cuando orinen también se haga el prepucio hacia atrás para evitar la acumulación de bacterias y orín dentro del prepucio”, comentó el doctor.
Puede consultar a Rogelio Gómez Loredo en el Centro Médico San Francisco frente al puente internacional Reynosa-Hidalgo, en el segundo piso o puede llamar a los teléfonos 899-922-9583 para concertar alguna cita.