Reynosa, Tam.-
La pérdida auditiva aparece poco a poco a medida que se envejece, también es conocida como presbiacusia y es frecuente.
Más de la mitad de las personas de Estados Unidos mayores de 75 años tienen algún tipo de pérdida auditiva relacionada con la edad.
Si se habla del envejecimiento, la exposición a ruidos fuertes puede causar pérdida auditiva.
Otros factores como un exceso de cerumen, puede reducir el funcionamiento de los oídos durante un tiempo.
Por lo general no se puede recuperar la audición, pero hay formas de mejorar lo que se oye. Según la OMS, mil 500 millones de personas tienen pérdida de audición en algún grado, pero solo 430 millones necesitan atención de rehabilitación.
Se conocen cuatro tipos de problemas auditivos, estos son:
- Pérdida neurosensorial: Ocurre cuando hay una alteración en el nervio auditivo o en el funcionamiento del oído interno.
2. Pérdida conductiva: Hay una pérdida de audición causada por un bloqueo del sonido, que pueda trasladarse del oído externo al medio. Puede ser tratada con una cirugía o con medicamentos.
- Pérdida mixta: Cuando ocurren problemas causados tanto por una pérdida neurosensorial, como por una conductiva.
- Trastorno del espectro neuropatía auditiva: Aparece cuando el sonido puede entrar por el canal auditivo, pero no puede ser procesado de forma correcta por el cerebro, ya que hay daños permanentes en el oído interno y el nervio auditivo.
¿Pero se ha preguntado, un músico puede carecer de este sentido, que se considera el más importante para su profesión?
Ludwig van Beethoven, compositor alemán, demostró que la sordera no era un impedimento para crear música, pues cuando ya había perdido totalmente la audición.
Según la revisión de su historia clínica se llegó a la conclusión de que la enfermedad de Beethoven fue una sordera del mecanismo de conducción por otosclerosis con fijación del estribo. Ésta inició a los 24 años de edad y se hizo progresiva hasta llegar a la fijación total cuando tenía 35 años.
Sin embargo de todas formas creó una de las obras más bellas antes creadas, la más conocida en el mundo, La novena sinfonía, también conocida como “El Himno a la Alegría”, que la llevó a cabo entre 1818 y 1824 por encargo de la Sociedad Filarmónica de Londres.
Su importancia fue tal que fue declarada Patrimonio de la Humanidad en el año 2002 por la UNESCO.
Para el año 1818 la dificultad auditiva fue tan importante que requirió usar sus conocidos “cuadernos de conversación”, ya que por medio de estos sus visitantes se comunicaban con él escribiendo en ellos.
Si presentas el más mínimo síntoma de sordera, es recomendable que acuda con su otorrinolaringólogo más cercano. (Con información de Sandra Paola Hernández)