Aunque los pacientes son en su mayoría mujeres, también los hombres se someten a este tratamiento quirúrgico que se encarga de moldear el contorno corporal.
Reynosa, Tam.-
La lipoescultura es un procedimiento estético que tiene como finalidad mejorar áreas del contorno corporal mediante la extracción de grasa, como el abdomen, región lumbar, cintura y espalda, en algunos casos se puede acompañar con una mejora en el aspecto de los brazos y los muslos.
En determinadas situaciones se pueden intervenir algunas otras partes como el cuello.
El cirujano plástico certificado Vidkar Iván Campos Martínez, explicó que no todas las personas son candidatas para este procedimiento y una de las principales causas es el no tener un IMC (Índice de Masa Corporal) adecuado.
“Esta cirugía no está encaminada a una reducción del peso corporal, va encaminada a mejorar la silueta del cuerpo, cuando existe un IMC muy alto, que es arriba de 30, los riesgos de complicaciones que están latentes en todas la cirugías se colocan muy por encima”, explicó.
La lipoescultura está recomendada para quienes no tienen obesidad, en casos donde no hay flacidez o relajación de la piel.
Las mujeres que hayan tenido un parto o cesárea deberán esperar por lo menos tres meses en adelante.
A los pacientes que se han sometido a una cirugía bariátrica para bajar de peso se les recomienda someterse a una cirugía postbariátrica que va encaminada a corregir aquellas áreas que hayan quedado con flacidez como brazos, busto, abdomen, espalda, muslos y glúteos.
ANTES DE LA CIRUGÍA
Antes de realizarse, se debe hacer una buena evaluación de cada caso, según el especialista, hay que evaluar en quién si y en quién no se puede obtener un buen resultado.
El paciente que tenga sobrepeso deberá tratar de bajar de forma saludable los kilos de más, haciendo ejercicio y siguiendo un plan alimenticio sugerido y supervisado por un nutriólogo.
También se realizarán estudios preliminares como los preoperatorios, se tomarán medidas de todas las zonas que se van a trabajar para tener un antecedente “del antes y el después” y se sacarán imágenes para demostrar los cambios.
RIESGOS
El especialista en cirugía plástica, estética y reconstructiva dijo que es un procedimiento que se realiza siempre en el quirófano de un hospital o clínica certificada que tenga todos los insumos y procesos de esterilización y cuidados para que el paciente esté seguro.
“Este procedimiento no es fácil ni simple, aunque pudiera parecerlo; es sumamente complejo porque es a ciegas, ¿qué quiere decir? que no se está viendo por donde está pasando la cánula por debajo de la piel”, advirtió.
Sin embargo, este procedimiento que dijo se hace “a ciegas” es posible gracias a la experiencia, el estudio, aprendizaje y a través de la conceptualización de lo que se está haciendo.
Agregó que la preparación de los cirujanos plásticos evitará algunas complicaciones, por ejemplo, el que la cánula pueda irse al pulmón o perforar otros órganos como el hígado, pulmones, corazón, estómago o intestinos.
“Es un procedimiento que lleva muchos riesgos, inclusive de muerte si no se hace con manos expertas”, dijo Campos Martínez.
“Se trabajan los dos lados del cuerpo y si se va a quitar una cantidad de grasa de un lado del cuerpo, debe ser exactamente la misma cantidad del otro y se tiene que estar cuantificando”, detalló.
Expresó que el objetivo de esta cirugía no es cuánta grasa se retire, sino cómo se va a ver la que se va a quedar.
“Debe haber una capa de grasa por debajo de la piel para que se vea una superficie lisa sin evidencia de que se ha hecho un trabajo de liposucción”, mencionó.
Añadió que las liposucciones que se hacen en consultorios, siempre serán mal realizadas porque trabajan planos superficiales o sea por debajo de la piel y ése no es el plano adecuado, sino en donde se deje intacta una capa de grasa por debajo de la piel.
“Veámoslo como un pastel de cinco capas, la de arriba es la piel y las de abajo son la grasa, lo ideal es hacer el trabajo desde la capa de abajo y dejar la de arriba, la segunda y en algunas áreas la tercera capa y quitar las de abajo, así una vez que se realice el proceso de desinflamación podamos ver resultados y se vea una superficie uniforme”, detalló.
Mencionó que una lipoescultura es un procedimiento que, idealmente, debe realizarse solo una vez, aunque, dijo, es posible realizar una segunda o tercera, siempre y cuando se cuente con tejido graso que todavía se pueda trabajar apropiadamente.
Además, dijo que cada que se hace una cirugía se incrementan los riesgos de complicaciones.
Cómo ejemplo mencionó lo siguiente: “cada vez se va formando un tejido de cicatrización por debajo de la piel que es como un pegamento, al tratar de separar esa piel con una cánula es fácil que se pueda ir al interior del cuerpo, dañar un órgano y tener más riesgo de sangrado”.
NADA ES IGUAL
Comentó que en las zonas donde se extrajo grasa ya no se regenera, ya que la cantidad de células que están distribuidas en el abdomen disminuyen drásticamente después de una lipoescultura bien hecha.
Pero si el paciente sube de peso, las pocas células de grasa que quedan tienen la capacidad de hipertrofia, de hacerse más grandes.
“Si se sube de peso, el cuerpo se deforma, no es proporcional, teniendo casos como en el que los hombros se ven más anchos con respecto a una cintura pequeña”, precisó.
DESPUÉS
El procedimiento dura entre tres horas y tres y media o hasta cuatro y casi siempre es un procedimiento ambulatorio.
“Levantamos a nuestros pacientes o los movilizamos de forma temprana, salen con una faja post operatoria inmediatamente de la cirugía y una vez que han cumplido su periodo en el área de recuperación los pasamos al área de cuidados postoperatorios inmediatos y es ahí en donde los sentamos, caminan y pueden ir al baño”, mencionó el médico.
Se les dan alimentos líquidos y si todo está bien, en el transcurso de la tarde se pueden ir a casa.
Precisó que durante las primeras semanas no es conveniente realizar ejercicio porque existe un proceso de inflamación en toda la superficie del cuerpo que puede generar mucha molestia e incomodidad al hacerlo.
A partir de la tercera semana se recomienda ejercicio leve e ir avanzando gradualmente de intensidad.
El resultado definitivo, dijo, se apreciará después del octavo o noveno mes, lo que quiere decir que durante 8 meses se lucirá similar a antes de la cirugía.
“También depende de la cantidad de grasa que se retiró y de cómo sea el cuerpo por dentro de cada persona, porque suele ser
diferente en cuanto a las dimensiones, estructura ósea y muscular”, añadió.
LA IMPORTANCIA DE LA CERTIFICACIÓN
El médico certificado por el Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva, A.C. destacó que los médicos de su especialidad enfrentan la intrusión de charlatanes en su profesión.
“Es muy importante tratar de alertar a la población para que se pongan en manos de alguien que tiene el estudio y la preparación para hacer ese tipo de procedimientos, que aunque se vean fáciles, no lo son”, expresó.
Dijo que se requieren de muchos años de entrenamiento y de ver el procedimiento sin tocar al paciente para empezar poco a poco.
Agregó que cuando ya se tiene la especialidad también hay un proceso de aprendizaje aunque ya se tenga la teoría.
El Dr. Vidkar Iván Campos Martínez, se encuentra en el hospital Christus Muguerza Reynosa, en el consultorio 211; con un horario de lunes a viernes, de 9 a 5 de la tarde y los sábados de 9 a 3.