Cd. de México.-
Cinco días después de que se diera a conocer que la joven tamaulipeca Jessica Gabriela “N” fue asesinada para extraerle a su bebé, sus restos y los de su pequeña fueron velados y sepultados.
Decenas de familiares y amigos de la joven se dieron cita ayer en la capilla número 3 del crematorio del DIF Tampico, donde las despidieron.
El sepelio se realizó luego de que autoridades confirmaran la identidad de la bebé y entregaran los restos a los familiares de la joven, la noche del miércoles pasado.
En la funeraria hubo confusión debido a que una persona quien dijo ser novio de Jessica se molestó y solicitó la presencia de autoridades para evitar la presencia de los medios de comunicación.
Jessica Gabriela “N”, quien tenía ocho meses de embarazo, desapareció el martes 27 de marzo, cuando avisó que se reuniría con una persona que le iba a regalar ropa para su bebé.