CD. VICTORIA, TAM.- Luego de permanecer en la plaza Juárez por 58 días en huelga de hambre y haber amenazado con auto mutilarse el dedo meñique de su mano derecha, el doctor José Luis Cantú Sierra levantó ayer su plantón.
Ya no se apreciaron las mantas en las que expuso a la opinión pública las razones que lo orillaron a manifestarse frente al edificio del gobierno estatal.
Lo anterior, luego de que el jueves personal del área jurídica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), acudieron al lugar para informarle que habían cedido a sus exigencias otorgándole las capacitaciones y demás demandas que solicitaba.
Pese a ello, el galeno señaló a los medios de comunicación que continuaría con su postura y llegaría a la automutilación.
Sin embargo, en punto de las 18:30 horas, tiempo que había fijado para proceder a cortar su extremidad, apareció en el lugar para en presencia del coordinador de Desarrollo Político de la Secretaría General de Gobierno, Juan Alonso Camarillo, para informar que la huelga había llegado a su fin.
Cantú Sierra dio lectura a un documento que portaba en sus manos y dijo que después de intensas negociaciones y pláticas sostenidas entre los representantes del IMSS, encabezadas por su titular, José Manuel Assad Montelongo y la mediación de la Secretaría General de Gobierno, en relación a las demandas que presentó el 19 de febrero, se encontró un camino que les permitió superar los puntos de interés.
“Nos queda claro que las situaciones anteriores se derivaron de malos entendidos entre el IMSS y el de la voz y que finalmente prevalece la cordura y la buena fe”, expresó.
Añadió que la buena disposición mostrada por el representante del seguro social en Tamaulipas, permitió llegar a acuerdos que una vez formalizados serán presentados ante las autoridades correspondientes “para que lo que motivó mi huelga de hambre se tenga como asunto totalmente concluido”.
El manifestante agradeció a la ciudadanía tamaulipeca, especialmente a los victorenses su apoyo, respeto y solidaridad durante los momentos difíciles que durante 58 días vivió en ese espacio de la plaza Juárez.
“Quiero dejar claro mi reconocimiento al Gobierno del Estado de Tamaulipas por el estricto respeto a la libertad de expresión y que rinden fruto las protestas ordenadas y pacíficas también se atienden y se atienden correctamente”, afirmó el manifestante.
En entrevista posterior, dijo a los reporteros que el arreglo al que llegaron y que motivó a levantar la huelga de hambre fue que se cumplirán los laudos con una capacitación apegada al contrato colectivo de trabajo y los pagos correspondientes a las aportaciones que estaban pendientes.
El profesionista de la salud, evitó hablar del monto económico que recibió como pago por las cuestiones que estaba demandando.
“Los depósitos corresponde a cuestiones parciales, la cuestión en un momento dado no es en cuanto a contabilizaciones de parcialidades, sino a cuestiones que en cuanto a una persona que se acerca a su jubilación deben estar acreditadas de manera completa toda su historia de su vida laboral y era donde había unas cuestiones inconsistentes”, agregó.
Cantú Sierra dijo que de momento no se jubilará, pues tiene que enfrentar estas cuestiones con el carácter de trabajador.
Mencionó que durante los 58 días en huelga de hambre perdió 11 kilos 370 gramos y a partir de ayer inició con el consumo de alimentos de manera paulatina y gradual, por ello así seguirá una semana más para poder tener la habilitación completa y poder absorber toda clase de nutrimientos.
-¿Está satisfecho con los resultados?, se le cuestionó.
– Qué buena pregunta, la satisfacción en si como sentimiento en mi interior es algo que en aspectos como en la calidad de lucha que he dado, estoy muy satisfecho, en cuestiones como la capacidad de mediación, de apoyo y de respaldo que como tamaulipeco he recibido por parte de mi gobernador, me siento muy satisfecho-, respondió.
“En cuestiones diferentes habría variantes que ahorita no vale la pena considerar, pero en general el balance es positivo”, dijo antes de retirarse del lugar que lo cobijó durante 58 días.
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