Cd. Victoria, Tamps. / Mayo 13.-
Una maestra del Cbtis 24 de esta capital denunció el abandono sindical e institucional en el que se encuentra e inició una huelga de hambre para recuperar las cinco horas de clases que, dijo, le fueron arrebatadas en forma ilegítima.
Leticia Guadalupe Ortega Martínez se plantó frente al portón del citado plantel educativo y mostrando una manta en la que pedía el apoyo de la autoridad, narró su odisea.
“A partir de hoy inició una lucha por recuperar 5 horas las cuales me pertenecen por derecho, ya que a partir de un movimiento generado por mi esposo se me entregó una plaza de tres cuartos de tiempo 30 horas técnicas, habiéndose acordado con el subdirector de Enlace Operativo de la DGTI que él ocuparía la plaza de oficina que por no ser compatible, se acordó dárselo a mi hermano José Antonio, sin embargo esto no sucedió así”, afirmó.
Ante esto, decidió ponerse en huelga de hambre el tiempo que sea necesario.
“Se han violentado mis derechos al no respetar el Artículo 10 del estatuto del SNTE que a la letra dice que el Sindicato tiene como objeto social y fines, defender los derechos laborales, sociales, económicos, y profesionales de sus miembros y por luchar por el desarrollo personal y el logro de las aspiraciones de los agremiados”, sentenció.
La profesora aseguró que el pasado 24 de febrero envió un escrito al representante sindical, Juan Guadalupe Sánchez Carrillo, quien ni siquiera lo recibió por no estar presente en el plantel.
De hecho fueron el secretario de Organización de la delgación sindical, Guadalupe Delgado Guillen y el Secretario de Trabajo y Conflictos, Jesús Alberto Mata Morales, quienes le informaron sobre la asignación de su plaza a una persona ajena.
“Desde hace mucho tiempo estoy reivindicando mis derechos, yo envié el oficio desde el mes de febrero, hay poca sensibilidad para atención de los trabajadores, violan los derechos aún que aportó cuotas, mi petición es que 5 horas que son de mi propiedad”, explicó.
Ortega Martínez añadió que estas horas le tocan por ley, debido a que su esposo se las cedió tras su jubilación.
“Mi esposo se jubiló y me dejó su recurso, pero lo acapararon, no sé quien esté protegiendo y acaparando ese recurso”, insistió.
Pese a que la catedrática se encuentra en huelga de hambre, acude a impartir sus clases en su horario para no descuidar el desempeño académico de sus alumnos.
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