Matamoros,Tamps. / Octubre 28.-
La marea roja los despertó a las cinco de la mañana. Fue el conocido “efecto aerosol” lo que le empezó a provocar tos y lagrimeo al pescador Juan Agustín Salinas y a su familia esa mañana. Los pescadores y habitantes de Playa Bagdad en Tamaulipas padecen este fenómeno que apareció primero en Texas y que se pasó hasta territorio nacional.
La marea roja que afecta el litoral tamaulipeco ha dejado más de 30 toneladas de peces muertos a lo largo de 37 kilómetros de Playa Bagdad, e impactado la economía y salud de pescadores y sus familias desde el pasado sábado.
Ante la alerta emitida por la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) el alcalde de Matamoros, Alfonso Sánchez Garza, ordenó la limpieza inmediata de la playa, y el apoyo para las 200 familias que residen en los tres campos pesqueros de este sector del golfo de México. Aún así, los pobladores piden ayuda porque la economía se paralizó.
Durante los trabajos de limpieza se han recolectado más de seis toneladas de peces muertos en ocho kilómetros de playa, que han sido enterrados en celdas encaladas. Faltan por limpiar 29 kilómetros, y la mancha amenaza con extenderse a Puerto El Mezquital.
Óscar Delgado, administrador de Playa Bagdad, revela que la marea roja fue detectada en Estados Unidos desde el pasado 16 de septiembre en la laguna San Martín ubicada en la Isla del Padre de Brownsville, y las autoridades ambientales de Texas siempre estuvieron mandando alertas a la Coepris para estar monitoreando el agua.
Señaló que fue hasta el pasado 21 de octubre cuando la marea roja fue arrastrada al litoral tamaulipeco por la entrada del frente frío número 6, afectando a Playa Bagdad que registró el fin de semana 82 mil dinoflagelados por litro de agua.
Las autoridades instalaron el comité interinstitucional, en el que participan la Secretaría de Marina, Protección Civil, Sector Salud y ayuntamiento local para determinar las directrices a seguir.
Aseguró que no se ha tenido la necesidad de evacuar a familias ni cerrar al turismo la playa Bagdad, pero se está monitoreando que no aparezca otra vez el “efecto aerosol”.
El domingo, la playa registró una afluencia de más de 400 personas, que en su mayoría tenían la curiosidad de ver a los peces muertos.
El alcalde Alfonso Sánchez Garza asegura que su gobierno está listo para brindar albergue a las familias de los tres campos pesqueros de Matamoros en caso de que la Secretaría de Salud decrete la evacuación.
“Estaremos al pendiente para apoyarlos con despensas y con lo que se necesite, ya que en estos tiempos ellos no pueden salir a pescar a trabajar y por consecuencia no tienen recursos para los alimentos, estaremos muy cerca de ellos para ayudarlos”.
– Amanecen con la noticia
Las familias que radican en la zona norte de Playa Bagdad informaron que la marea roja los despertó la mañana del sábado por los síntomas que el “efecto aerosol” provoca.
“Salimos, para ver qué pasaba, y efectivamente ya estaba aquí la marea roja. El mar ya estaba arrojando cientos de peces muertos, y optamos por irnos a refugiarnos con un familiar que habita en Matamoros, para evitar más malestar a nuestros hijos”, cuenta Juan Agustín Salinas.
Resalta que la situación es lo mismo de cada año, pero ahora ellos no esperaron a que la Secretaría de Salud emitiera un nivel de máxima alerta para evacuar la zona, ya que la madrugada del sábado era mucho el malestar para sus cuatro hijos y para su esposa.
“Lo único que pedimos es que las autoridades nos ayuden económicamente, ya que la marea roja puede durar muchos días, y pues nosotros vivimos de la pesca, y al día”, menciona Juan Agustín.
Por su parte, familias de la zona sur de Playa Bagdad resintieron el efecto después de las 11:00 de la mañana del sábado, pero nadie evacuó, se limitaron a seguir las mismas instrucciones de cada año.
“Vinieron las autoridades de Salud y nos dieron tapabocas, además nos recordaron qué pasos tenemos que seguir durante la marea roja”, comenta una mujer que ayuda en las labores de limpieza del balneario natural de Matamoros.
“Tenemos que proteger dentro de nuestras casas a niños y a las personas de la tercera edad, que no salgan, que no se quiten su tapabocas y estar al pendiente de ellos para que no les cause efectos graves este fenómeno natural”, señala la señora Maribel Nieto.
Resalta que mientras que las autoridades de Salud no emitan una declaratoria de evacuación, no van a abandonar sus casas.
“Por lo pronto, sólo tenemos que abandonar nuestro ritmo de vida, ya que no podemos pescar, ni vender mariscos, y esto sin duda nos va a afectar muy feo, ya que hay muy poco turismo, y por ende pocas ventas.
“Pero aquí podemos seguir. Ahora sólo esperamos que la autoridad nos ayude económicamente mientras que nuestros hombres puedan salir a la mar”, dice.
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