Matamoros, Tamps.-
Las personas que se acercan al comedor comunitario “Manos Unidas” se quejan del trato de las encargadas, además de que no sirven la comida a su hora y de que lo hacen de mala gana.
Sin embargo, Sergio Matías Gracia, quien ha visitado el lugar por más de 20 años y asegura que la actitud de las cocineras no siempre fue mala.
Ante esto el sacerdote Jorge Molina Fiscal, coordinador interino del comedor comunitario, dijo que la atención que se brinda en el citado lugar es para todos sin excepción.
Esto porque “Manos Unidas” fue creada para albergar a quien se acerque aunque sea para pedir un taco.
Añadió que hasta el momento nadie se ha quejado de que le hayan negado la atención, pero en caso de suceder sería porque los comensales llegan en actitud violenta y en el comedor no se acepta ningún tipo de desorden.
Dijo que la Diócesis de Matamoros y el patronato del comedor “Manos Unidas”, trabajan arduamente para ayudar a los necesitados consiguiendo comida y fondos para la manutención del lugar al que ya se le hizo una remodelación.
Cabe mencionar que en el comedor se atiende aproximadamente a 50 personas, a quienes se les da almuerzo y comida.
Molina Fiscal indicó que la comida se realiza con las donaciones de la gente y que si alguien desea ayudar al patronato del comedor “Manos Unidas”, puede llevar sus alimentos a las oficinas de la catedral.
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