Cd. Victoria, Tam.-
La Presidenta de Morena Tamaulipas, Lupita Gómez dijo que ante el desmantelamiento de una red de corrupción que operó impunemente durante el gobierno panista, el único argumento que le queda al PAN es el de la “persecución política”. Sin embargo, los hechos son claros: no se trata de un ataque mediático ni de una venganza política, sino de justicia.
Hoy, los liderazgos panistas intentan defender lo indefendible. Ismael García Cabeza de Vaca no está siendo investigado por sus ideas, sino por su participación en un esquema de saqueo que afectó gravemente al pueblo de Tamaulipas.
Mientras su hermano, Francisco García Cabeza de Vaca, es prófugo de la justicia, Ismael se aferra al fuero para evadir su responsabilidad por el desvío de más de 1,500 millones de pesos del erario público, operado a través de una red de funcionarios estratégicamente colocados durante la administración panista.
Los hechos hablan por sí mismos:
• Más de 60 carpetas de investigación abiertas contra funcionarios de la pasada administración panista, según la Contraloría estatal.
• Desvíos millonarios de recursos federales a cuentas de familiares y empresas fantasma.
• Fraudes y desfalcos desde instituciones clave como la Universidad Autónoma de Tamaulipas, la Secretaría de Salud y el Ayuntamiento de Ciudad Victoria, bajo gobiernos panistas.
