CD. VICTORIA, TAM.- Hasta el momento no se tiene una estadística oficial sobre las personas desaparecidas en Tamaulipas, reconoció el fiscal especial en atención a personas no localizadas o privadas de su libertad, Pedro Efraín González Aranda.
Explicó que la estadística de personas desaparecidas en la entidad es muy fluctuante, debido a que con los trabajos de búsqueda se logra localizar personas reportadas por sus familiares, así como víctimas de secuestro, e incluso cuerpos.
“Estamos trabajando en hacer una depuración porque es una estadística fluctuante, se trabaja en la recepción de denuncias y en la localización de personas, entonces una estadística física no la tenemos”, señaló.
Comentó que Tamaulipas es un estado de tránsito por lo que muchas de las personas desaparecidas provienen de estados del sur principalmente de San Luis Potosí y Veracruz, aunque también hay reportes de desaparecidos provenientes de Nuevo León.
“Geográficamente Tamaulipas es un estado de tránsito sobre todo para quienes viajan a Estados Unidos bien sea por personas que vienen del sur del estado o viceversa. Tenemos casos sobre todo de San Luis y de Veracruz”, expresó.
En ese sentido comentó que la Procuraduría del Estado colabora con las procuradurías de las entidades como Nuevo León, San Luis Potosí y Veracruz para la localización de personas desaparecidas en Tamaulipas.
“Hay una coordinación constante con las procuradurías de cada estado en el trabajo de la búsqueda, tanto en el apoyo que les pedimos como el que nos solicitan ellos para localizar a las personas”, añadió.
Dijo que las recompensas que pudieran ofrecerse por información para localizar a los desaparecidos sería una buena opción, y es la Procuraduría de Justicia del Estado quien en base a su presupuesto ofrecería una recompensa por el paradero de ciertas personas. Sin embargo hasta el momento no se ha dado el caso.
“El gobierno del estado en coordinación con la procuraduría forman un comité y analizan la viabilidad de ofrecer una recompensa y en su caso son quienes tienen el soporte económico para la recompensa”, concluyó.