Matamoros, Tam.-
El líder estatal del PAN, José Alberto López Fonseca, rechazó que dentro de su partido exista divisionismo, por tal motivo aseguró que están listos para ganar las elecciones del 2015 y la gubernatura en el 2016.
“En el PAN hay democracia y cada militante puede irse con cualquiera de los candidatos sea Gustavo Madero o Ernesto Cordero y esa disputa no nos afectará porque estamos trabajando para ganar los próximos procesos electorales en Tamaulipas”, sentenció López Fonseca.
Asimismo señaló que en el 2016 van a pintar de azul a Tamaulipas porque históricamente en los últimos procesos locales y federales el Partido Acción Nacional ha ganado todos y actualmente gobierna en los municipios con mayor número de votantes.
El líder del PAN en rueda de prensa donde se hizo acompañar de los diputados locales de Matamoros, Nuevo Laredo y Reynosa afirmó que hasta en las elecciones donde resultó electo el presidente Enrique Peña Nieto en Tamaulipas ganó el PAN con más de 600 mil votos y eso es un indicativo de que rumbo tomará el Estado en el 2015 y en el 2016.
López Fonseca externó que ellos no son como los del Partido Revolucionario Institucional, (PRI) y que en el caso Reynosa ya se pusieron de acuerdo para que no los ocurra lo de la elección pasada donde dos aspirantes buscaron ser los candidatos a la alcaldía y donde por cierto perdieron las elecciones por esa disputa interna.
Asimismo comentó que el próximo candidato a la gubernatura del PAN seguramente entrara por el norte porque aquí tienen a Leticia Salazar Vázquez, en Nuevo Laredo a Carlos Cantú Rosas, y en Reynosa a Maki Ortiz y todos son buenos gallos para arrebatarle la gubernatura al PRI.
Por su parte el diputado local Francisco Elizondo sugirió que los presidentes municipales deben de tener su propia seguridad, pero desacreditó el hecho de que un secretario de Desarrollo Social del municipio, tenga asignada una escolta de marinos tal y como lo tiene Luis Alfredo Biasi en Matamoros.
Asimismo señaló que no es correcto que los alcaldes y exalcaldes se vayan a radicar a las ciudades vecinas de Estados Unidos, porque al terminar su mandato deberían de tener escoltas para que se queden a vivir en su lugar de origen y que no pase lo que le ocurrió al exalcalde Benjamín Galván.
Elizondo Salazar reiteró que si algún alcalde o funcionario ha recibido amenazas que las haga públicamente y denuncie los hechos ante la autoridad competente, para que se tomen cartas en el asunto y se investigue hasta las últimas consecuencias.
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