Matamoros, Tamps. / Junio 8.-
El ahora obispo electo de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, ofreció una misa para agradecer a la feligresía de la región su apoyo durante los 6 años que estuvo al frente de la Diócesis de Matamoros.
Por órdenes del Vaticano el prelado fue removido hacia aquella comunidad religiosa, donde tomará el cargo oficialmente el próximo 16 de junio. Con ello, termina un sexenio de trabajo dentro del catolicismo regional.
Ante una iglesia repleta de fieles, sacerdotes e integrantes de grupos pastorales, el obispo encabezó una de sus últimas liturgias en la Catedral Nuestra Señora del Refugio, la cual resulto emotiva por el sermón.
Armendáriz Jiménez expreso que fue en esta Diócesis donde se formó como Obispo, ya que fueron muchos los retos que enfrentó, así como también, las múltiples experiencias que todo ello le dejó.
Agradeció el apoyo de los matamorenses a quienes catalogó como gente trabajadora dispuesta a participar en los proyectos pastorales para procurar el desarrollo de la Iglesia Católica.
Externó que es difícil dejar la ciudad y las relaciones que entabló durante su función, sin embargo, no puede desatender el llamado que le hace la Santa Sede. Aseveró que siempre será tamaulipeco de corazón.
También pidió a los sacerdotes trabajar en cada una de sus comunidades en aras de fortalecer el catolicismo.
Aunque dijo que existe una congregación solida, reiteró que es menester continuar trabajando en el terreno espiritual, pues sólo así se logrará afianzar la fe en tiempos de aflicción por los acontecimientos violentos registrados en esta parte de la frontera de Tamaulipas.
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