CD. VICTORIA, TAM.- Con el objetivo de combatir la pobreza en la entidad, Tamaulipas impulsa el cultivo de hortalizas como lechuga, tomate, rábanos, chile, zanahoria y cebolla, entre otras, mediante el programa “Comunidades Rurales” que se aplica en huertos familiares y comunales.
El titular de la Secretaría de Desarrollo Rural, Carlos Solís Gómez, dijo a Notimex que este proyecto nació con la intención de combatir la pobreza en la zona rural y estimular el autoempleo, además de que se consuman productos orgánicos y a bajo precio.
El entrevistado señaló que para el desarrollo de esta iniciativa se capacita a las familias y personal de las escuelas que operan en ejidos y comunidades rurales de Tamaulipas a fin de que tengan los elementos necesarios para producir sus alimentos.
Es preocupación que los habitantes de las comunidades rurales incrementen su calidad de vida, por lo que buscan consolidar un mejor nivel de actividades en general, dijo.
Mencionó que se apoya a las familias de zonas ejidales con paquetes de semillas para huertos y granjas de especies menores de traspatio.
“Tenemos la intención de ampliar el programa de huertos familiares, de traspatio, para que más personas tengan la posibilidad de tener alimentos orgánicos a menor costo, que puedan accesar a todo tipo de hortalizas para que puedan mejorar su calidad de vida y salud”, dijo.
Es a través del plan “Comunidades Rurales” que se trabajan 172 proyectos en beneficio de los habitantes de las zonas rurales, a quienes se estimula para que puedan autoemplearse.
Expuso que del año pasado a la fecha se han entregado mil 955 apoyos a igual número de familias distribuidas en los municipios de ciudad Victoria, Altamira, Reynosa, Mante, Lera, Güémez, Rio Bravo y Camargo.
Solís Gómez precisó que personal de la Secretaría de Desarrollo Social realiza de manera constante recorridos por los ejidos a fin de supervisar los avances y continuidad de dichos programas.
El funcionario estatal ejemplificó que recientemente, familias del ejido “Martín Rocha”, recibieron invernaderos de traspatio y aves de postura del programa de “Comunidades Rurales” además de maquinaria, herramientas, consumibles, ejemplares de crianza y semillas.
Es así como Francisco Zavala, agricultor y presidente de la asociación de padres de familia de la escuela primaria “Gregorio Torres Quintero” de este ejido Martín Rocha, dijo que a través de los programas de siembra de hortalizas pueden obtener la materia prima para dar de desayunar a los escolapios.
Mencionó que la escuela cuenta con un desayunador para los 94 alumnos, por lo que las frutas y verduras que ahí se siembran sirven para la preparación diaria de sus alimentos.
Agregó que además de utilizar los huertos para el autoconsumo, esta práctica del campo les sirve a los alumnos quienes aprenden diferentes técnicas de una de las actividades de mayor desarrollo en esa región como lo es la agricultura.
En tanto Juliana Anaya, estudiante de quinto grado de la escuela “Gregorio Torres Quintero”, mencionó que aprender los procedimientos para el cultivo de hortalizas es interesante y divertido.
La menor de 11 años de edad, comentó que además de cultivar sorgo también estudian en su escuela como producir hortalizas y cereales, con poco equipo y recursos.
La estudiante, quien acude al turno matutino de la escuela pública, refirió que al igual que sus compañeros disfruta aprender sobre actividades agrícolas, pues su localidad en una de las regiones con mayor producción de granos en esta entidad.
En tanto el presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del cabildo, Isidro Núñez Velázquez, refirió que el ejido “Martin Rocha” conecta con un tramo ejidal de más de 70 mil hectáreas productivas de sorgo.
El entrevistado destacó que dicho plantel educativo ha sido beneficiado con diversos insumos a fin de que los alumnos aprendan sobre la agricultura, una de las principales labores de ese ejido, para que desde temprana edad tengan la cultura del autoconsumo y los alimentos que ingieran sean más saludables, sin químicos.
El también líder agrario en Reynosa, añadió que la intención es que los alumnos de educación básica además de cursar materias académicas puedan aprender las técnicas y métodos de uno de las principales actividades que les dan sustento a sus casi 400 habitantes.
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